Un plazo de dos años fijó el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, para el control de la pandemia causada por el nuevo coronavirus.
«La OMS siempre ha sido prudente sobre las estimaciones de cuán rápido la pandemia puede ser manejable mientras que no existe una vacuna probada», afirmó.
Según el representante de la agencia sanitaria, el control del COVID-19 sería más rápida que el que se registró con la gripe española, que a comienzos del siglo XX afectó a cerca de 500 millones personas y dejó unos 50 millones de fallecidos.
Si bien aseguró que hoy «el virus tiene más posibilidades de extenderse, puede moverse más rápido porque estamos más conectado», también «tenemos más tecnología para pararlo y el conocimiento para hacerlo».
«Tenemos por lo tanto una desventaja de la globalización, de cercanía y contacto, pero una ventaja de una mejor tecnología», refrendó desde Ginebra, la sede de la OMS.
En ese sentido, Tedros consideró que es posible acabar con la pandemia «en menos de dos años».
Se estima que cerca de 22 millones de personas se han contagiado del virus SARS-CoV-2 y unas 800,000 a consecuencia de la enfermedad, mientras distintos países avanzan en la búsqueda de una vacuna.
De todos modos, apuntó que una potencial vacuna «no va a poner fin a la pandemia por sí sola», por lo que es necesario contar con una «solidaridad global».
Además, urgió a los países a «aprender a controlar y manejar este virus usando las herramientas actuales», y a «hacer los ajustes en la vida diaria que son necesarios para mantenerse a salvo», ya que a su juicio los confinamientos «no son una solución a largo plazo para ningún país».