Una de las principales razones de la angustia de millones de personas alrededor del mundo es el encierro que está produciendo el coronavirus, producto de las medidas de cuarentena sanitaria y sobre todo el distanciamiento social necesario para evitar contagios.
Mientras algunas naciones ya planifican su salida a rutinas un poco más normales (como los días previos a la pandemia), un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard, informaron en un artículo publicado el martes 14 de abril en la revista Science, que el distanciamiento ya sea total o de forma parcial podría durar hasta 2022.
«Utilizamos estimaciones de estacionalidad, inmunidad e inmunidad cruzada para los betacoronavirus OC43 y HKU1 (gripes comunes) a partir de datos de series temporales de los EEUU para informar un modelo de transmisión de SARS-CoV-2 (virus del COVID-19). Proyectamos que los brotes recurrentes de SARS-CoV-2 durante el invierno probablemente ocurrirán después de la onda pandémica inicial más grave. En ausencia de otras intervenciones, una métrica clave para el éxito del distanciamiento social es si se exceden las capacidades de atención crítica. Para evitar esto, puede ser necesario un distanciamiento social prolongado o intermitente en 2022», advierte el informe.
Esto porque según señalan este distanciamiento social fue tan efectivo, que muchas personas se están quedando sin inmunidad, por lo que un regreso a condiciones normales volverá a elevar los casos y será un espiral que sólo se detendría en caso de encontrar una vacuna en los próximos 18 meses.
Marc Lipsitch, un respetado epidemiólogo y uno de los autores principales del estudio, dijo en una conferencia de prensa que «las suposiciones razonables son que a corto plazo podría haber protección parcial durante un año o cerca de él, y a largo plazo, podría ser varios años de buena protección. Pero es realmente especulativo en este momento».
Un artículo del MIT también entrega algunas claves acerca de esta variable de un distanciamiento social más prolongado.
«Bajo estos supuestos, y suponiendo además que el distanciamiento social reduce la transmisibilidad del virus en un 60% y que el verano la reduce en un 40%, el modelo pronostica que para mantener el número de casos que requieren atención crítica por debajo de lo que los hospitales pueden manejar actualmente, EEUU necesitaría mantener las actuales condiciones de distanciamiento social hasta mediados de mayo, restablecerlas para el mes de agosto y nuevamente a fines de octubre hasta fin de año, y luego de febrero a abril de 2021, en junio de 2021, y por períodos comparables en 2022 y más allá», comenta la publicación.