El coronavirus SARS-CoV-2 parece una mala saga de películas, con secuelas que no paran de surgir. La última novedad llega desde Reino Unido, con la muy contagiosa variante recombinante XE, mezcla de BA.1 (ómicron) y su subvariante BA.2.
“De momento, realmente no hay ninguna preocupación para la salud pública”, afirmó John Brownstein, epidemiólogo y jefe de innovación del Hospital Infantil de Boston. “Las variantes recombinantes se producen una y otra vez”, comentó a ABC News.
Según el experto, “la razón de que esta sea la variante recombinante XE es que ya hemos tenido XA, XB, XC, XD, y ninguna de ellas ha resultado ser verdaderamente preocupante”. En otras palabras, estas mixturas son comunes y se extinguen tan rápido como aparecen.
Aparecida el 19 de enero de 2022 en Reino Unido, la Agencia de Seguridad Sanitaria reportó la penúltima semana del tercer mes un total de 637 casos de la variante XE. Lo inquietante es que podría ser “ligeramente” más transmisible que BA.2, en alrededor de 10 por ciento.
En la Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguraron que “continúa monitoreando y evaluando de cerca el riesgo para la salud pública asociado con las variantes recombinantes, junto con otras mutaciones” del coronavirus causante de la peor pandemia en más de un siglo.
Al cierre de la edición de esta nota, más de 490 millones de personas se habían infectado con SARS-CoV-2 desde finales de 2019. El conteo de la Universidad Johns Hopkins establecía en 6.1 millones los casos fatales producto de la enfermedad.