Una impensada crisis sanitaria podría generar a largo plazo el COVID-19, planteó Sassan Rafi, un médico que ha estudiado enfermedades pulmonares durante los últimos 15 años.
A través del periódico británico Daily Mail, el especialista afirmó que miles de pacientes se enfrentarán a una “bomba de tiempo” después de superar el contagio.
Según el también doctor en fisiología molecular, celular y sistémica de la Universidad de California en Davis, las personas que han desarrollado fibrosis pulmonar tras haber recibido por semanas asistencia de un respirador experimentarán una “impactante” tasa de morbilidad.
El medio explicó que la enfermedad es causada por virus agresivos, como el SARS-CoV-2, y ocurre cuando el tejido pulmonar está dañado y cicatrizado.
“Ese tejido grueso y rígido dificulta el funcionamiento correcto de los pulmones y el intercambio de oxígeno, por lo que puede provocar insuficiencia respiratoria”, agregó.
De acuerdo con Rafi, «la fibrosis pulmonar tiene un pronóstico (de sobrevida) de tres años, que es peor que muchos tipos de cáncer, y actualmente no existe un tratamiento óptimo».
La existencia del mal implica un “punto de no retorno» para los pacientes, incluso cuando hayan superado el COVID-19 y la hospitalización por la presencia de líquido en los pulmones.
«Es una enfermedad progresiva, lo que significa que pueden sentirse bien, pero sigue empeorando y esa es una realidad que nadie está abordando», alertó.
Daily Mail añadió que algunos pacientes podrían depender de por vida de un respirador mecánico, mientras que otros necesitarían un trasplante.
«No se trata solo de quién está muriendo hoy por el virus, sino de lo que vendrá dentro de los próximos años, una vez que el COVID-19 haya desaparecido», expuso Rafi.