Justo cuando estamos pasando la peor pandemia en años con el coronavirus, una nueva mala noticia azotó con fuerza a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y encendió las alarmas: la reaparición de un brote de ébola en África.
Según informó AP, el caso se registró en el Congo, país que hace tres días se había declarado libre de la contagiosa enfermedad. Se dio en la ciudad de Beni, donde anteriormente se habían entregado cifras de varios casos. Fueron en total 42 días sin ningún paciente con el virus, hasta ahora.
El ébola es un virus que ocasiona sangrado agudo, falla orgánica y hasta la muerte. Los humanos pueden contagiar el virus a otros humanos mediante el contacto con fluidos corporales como la sangre. Los primeros síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular y escalofríos. Más adelante, es posible experimentar hemorragias que pueden provocar vómitos o tos con sangre.
El jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que la declaración había sido planeada para el lunes. «Nos hemos estado preparando y esperamos más casos», dijo, reflejando la precaución que se mezcló con el optimismo en los últimos días.
En su cuenta en la red social Twitter, la directora para África de la OMS, Matshidiso Moeti, manifestó estar muy triste.
I am sad to hear about a new #Ebola case in northeastern #DRC. @WHO is on the ground supporting the investigation and will continue to work side by side with the Ministry of Health to end Ebola. pic.twitter.com/0tailaqdxR
— Dr Matshidiso Moeti (@MoetiTshidi) April 10, 2020
Mike Ryan, jefe de emergencias de la OMS, también comentó que «tendremos que pasar otros 42 días», para así decretar un nuevo brote de ébola en la región. «Tal vez esa sea nuestra lección para COVID-19: no hay una estrategia de salida hasta que usted tenga el control de la situación. Siempre debes estar listo para comenzar de nuevo … nunca te sorprendas».
Kate Moger, vicepresidenta regional del Comité Internacional de Rescate, señaló por su parte que «este es un desarrollo devastador para las comunidades del este (Congo) que también están amenazadas por el brote de coronavirus, además del conflicto y el desplazamiento en curso».
El brote de ébola se ha cobrado más de 2.260 vidas en los últimos dos años, en segundo lugar después del brote de 2014-2016 en África occidental.
Lo más complicado de todo para la región es que pronto debería llegar con más fuerza el COVID-19, lo que pondrá a prueba el débil sistema de salud de los países sobre todo de la zona sub-sahariana y que se encuentran en el centro, más cercanos al mismo Congo y a naciones más grandes como Nigeria y Camerún.