“La conclusión general es que el Galaxy A52 con 5G es uno de los candidatos a llevarse la medalla de oro como mejor gama media del año”
- Diseño atractivo y funcional.
- Rendimiento correcto.
- Carga rápida.
- Resistencia al polvo y el agua con certificación IP67.
- Precio competitivo.
- Batería un poco justa.
- No tiene puerto jack.
Samsung acaba de renovar toda su familia Galaxy A, una saga de teléfonos de gama media que desde hace años son grandes superventas. Concretamente la empresa ha lanzado los nuevos Galaxy A32, Galaxy A52 y Galaxy A72. Los tres modelos llegan en cuatro colores (negro, blanco, azul celeste y lila), pero cada uno cuenta con diferentes especificaciones adecuadas a su gama y rango de precio.
Tuve la oportunidad de probar el modelo intermedio, el Samsung Galaxy A52, así que, si estás pensando en comprarte uno, te invito a que sigas leyendo porque te voy a contar todos los aspectos fundamentales que debes tener en cuenta.
Diseño fresco y cómodo
Los Galaxy A siempre han llamado la atención por su diseño, y el Galaxy A52 no es la excepción. A primera vista lo que más destaca es la parte trasera con un módulo de cámaras que apenas sobresale del cuerpo y un acabado muy agradable en mano, tanto al tacto como al agarre. Se trata de una trasera de policarbonato ligeramente mate y rugosa en la que las huellas apenas se marcan y que además no se resbala al sostener el dispositivo.
Sus dimensiones son 75.1 x 159.9 x 8.4 milímetros y pesa 189 gramos, medidas ideales tanto para el agarre con una mano como para sostenerlo por un tiempo prolongado para hacer fotos o ver series y videos en su pantalla.
Hablando de su pantalla, el Galaxy A52 integra una de 6.5 pulgadas Super AMOLED con una resolución FullHD+. En el caso del modelo con 5G, que es el que probé, la tasa de actualización llega hasta lo 120 Hz, aunque se puede mantener en 60 Hz si no quieres que gaste demasiada batería. Evidentemente la fluidez con 120 Hz tanto al jugar como al navegar por el propio sistema operativo del teléfono es muy superior que con 60Hz.
En general la experiencia con la pantalla es buena y da una calidad suficiente para reproducir todo tipo de contenido multimedia y navegar por internet. El nivel de brillo también es correcto, aunque eso sí, como suele suceder con el calibrado de pantalla de los dispositivos Samsung, los colores se ven algo saturados.
Rendimiento correcto
Samsung incorpora en este teléfono un procesador Snapdragon 750G, chipset que le aporta conectividad 5G. El teléfono responde al uso diario perfectamente y no presenta problemas de lags ni de tirones ni siquiera a la hora de ejecutar videojuegos exigentes a nivel gráfico. Lo que sí se nota es un ligero calentamiento al usarlo de manera continua al reproducir videos o jugar.
El procesador está acompañado de dos versiones de memoria RAM que van desde los 6 hasta los 8 GB, y memorias de 128 o 256 GB ampliables mediante tarjeta de memoria microSD. La unidad que probé es la de 8 GB con 256 GB; en general dio un rendimiento excelente.
Respecto a la autonomía, la batería de este teléfono es de 4,500 mAh, más que suficiente para llegar al día completo con un uso bastante intensivo, incluso con la pantalla en 120 Hz. Eso sí, no pude pasar un día sin cargarlo, aunque debido a que el teléfono cuenta con carga rápida e incluye cargador en la caja, en aproximadamente media hora tenía casi el 60 por ciento de la carga.
Cuatro cámaras que dan mucho de sí
Este teléfono tiene una cámara compuesta por un sensor principal de 64 megapixeles, un gran angular de 12, un sensor macro de 5 y un sensor para la profundidad también de 5 megapixeles.
En general y como se puede ver en la galería de muestra, las imágenes capturadas con luz natural son bastante buenas, con un nivel correcto de luminosidad, nitidez y una reproducción del color bastante realista.
Lo cierto es que en interiores –o escenas con menos luz en general– hay pérdidas de nitidez que dan resultados con bastante ruido y que empastan bastante los colores y las texturas.
Los retratos son bastante nítidos, aunque el lente tarda un poco en enfocar correctamente. El nivel de desenfoque se puede ajustar a demanda antes de disparar, pero no recomendamos hacerlo al máximo pues el resultado es bastante artificial.
La cámara frontal de 32 megapixeles también da resultados muy nítidos y brillantes, aunque con una reproducción del color ligeramente saturada.
Conclusiones
Como puedes darte cuenta, este teléfono tiene unas especificaciones muy equilibradas y competitivas dentro de la gama media. Su pantalla ofrece una calidad muy buena, su rendimiento es más que suficiente para un usuario medio y su cámara da resultados buenos.
La batería también cumple y el hecho de que cuente con sistema de carga rápida e incluya cargador son puntos a su favor, sobre todo si tenemos en cuenta que su precio no sobrepasa los 500 euros ni en la más alta de sus configuraciones. En concreto, este dispositivo en su versión 5G tiene un precio de 429 euros para la configuración de 6 GB/128 GB, y de 489 euros para la versión de 8 GB/256 GB.
Quizá un poco más de batería hubiera mejorado la experiencia, pero la conclusión general es que este Galaxy A52 con 5G es uno de los candidatos a llevarse la medalla de oro como mejor gama media del año.