En la ciudad de Santiago, Lenovo y Ducati implementaron una experiencia inmersiva pionera en América Latina con un simulador de motociclismo de velocidad. La iniciativa fue posible gracias a la integración de un videojuego desarrollado en Chile por encargo de la firma tecnológica, una motocicleta Panigale V4 S y la plataforma de la compañía Moto Trainer Latam.
“Como socio tecnológico principal de Ducati en MotoGP, hemos entregado desde 2018 soluciones de inteligencia artificial y análisis de datos en vivo a la innovación y la seguridad de los pilotos”, comentó Ana María Henríquez, gerenta de Marketing de Lenovo Chile.
La sucursal sudamericana de la multinacional con sede en Beijing apostó por mezclar un vehículo real de alta gama con un circuito futurista desplegado gracias a la realidad virtual. El trazado incluía obstáculos estáticos y se asemejaba más a las pistas de Tron que a Jerez de la Frontera o Montmeló.
El software ideado por Augmented Experiences exigió los máximos requerimientos técnicos a las gafas Oculus Quest y a la computadora portátil tope de gama Lenovo Legion 7 Gaming, cuya AI Engine “optimiza automáticamente la distribución de la energía a la CPU y GPU”, según el fabricante.
Con una década de experiencia en el motociclismo competitivo, la corredora profesional Rafaela Burgos ofició de anfitriona e instructora en la exhibición, que por 10 días estuvo abierta a quienes visitaron en Santiago el centro comercial Parque Arauco.
“El simulador me hizo muy bien para volver a las pistas, después de una lesión. Es cierto que la motocicleta está estática, pero la sensación es tal cual a las carreras al doblar de un lado a otro. Sirve mucho para practicar la postura y sentir lo que experimenta un piloto en carrera”, afirmó la deportista.