La realidad virtual y la realidad aumentada (RV y RA) no han tenido esa explosión que sí han experimentado segmentos como el móvil o el de los wearables. Esa chispa faltante tal vez llegue ahora con Apple, compañía a la que no le interesa llegar primero a determinados sectores, sino convertirse en el referente de los mismos, como lo demostró con el iPhone o con los relojes inteligentes Apple Watch. Por eso es que decimos que fracasos en RV y RA son una señal de que Apple puede reinar en estos terrenos.
En un extenso artículo de CNBC se ofrecen varias razones por las que los de Cupertino podrían tener éxito en espacios donde los demás han fallado.
“Apple inventa rara vez algo sin precedentes. En su lugar, toma ideas existentes y las refina de manera crítica, con lo que las hace mucho más atractivas para los consumidores”, se lee en la publicación.
Y no es que ello no conlleve ningún tipo de trabajo por parte de la marca de la manzana. CNBC expone que los profesionales de la industria dedican mucho tiempo a explicar las diferencias entre RA, RV y realidad mixta.
“Si Apple puede desmitificar toda la industria para el público, podría terminar con los primeros visores que los consumidores principales entiendan y quieran”, precisa el medio.
Además de una base de software y hardware que Apple ha estado construyendo y comprando durante años, otra de las razones que tiene a su favor es que la marca no se rinde tan fácilmente, ve todas las aristas hasta conseguir un negocio exitoso.
“Los analistas no esperan que las gafas de Apple se conviertan en una fuente importante de ingresos de inmediato, pero creen que la firma está incursionando en un mercado que algún día podría valer miles de millones”, de acuerdo con CNBC.
Fracasos en RV y RA
No hablamos de compañías que se fueron a la bancarrota, sino de aquellas que no pudieron o no han podido consolidarse en lo que se conoce como el consumidor final.
Meta y su fallido metaverso
En octubre de 2021, la compañía a cargo de Mark Zuckerberg dejó de llamarse Facebook para transformarse en Meta, con la intención de impulsar el metaverso, un entorno que emplea las realidades virtual, aumentada y mixta, principalmente.
“Es el próximo paso en la evolución de las tecnologías sociales y marca el comienzo de un nuevo capítulo para nuestra empresa”, explicó la compañía en ese momento.
Zuckerberg agregó que este desarrollo sería todavía más inmersivo y que “tocaría” cada producto de la compañía que preside.
Lo cierto es que el metaverso de Meta no ha podido consolidarse, romper la barrera con el fin de extenderse ya no al usuario final, sino a otros sectores. La irrupción de la inteligencia artificial generativa, como ChatGPT, también le ha puesto un clavo más a su tumba, para más de un especialista.
“La exageración no pudo salvar al metaverso (de Meta) y la falta de una visión coherente del producto finalmente condujo a su declive. Una vez que la industria de la tecnología recurrió a una tendencia nueva y más prometedora, la IA generativa, el destino del Metaverso quedó sellado”, escribió Ed Zitron en un artículo de opinión en Business Insider, el pasado mayo.
Las gafas de Google
Hace más de 10 años se presentó un producto que hacía soñar que los usuarios obtendrían distintas capas de información directamente en unos lentes, parecidos a los que las personas usan actualmente. Los Google Glass vieron la luz en la conferencia de desarrolladores I/O en junio de 2012.
Las gafas basadas en RV, con control táctil y capacidad de tomar fotos y video, entre otras características, contaron con distintas versiones. Sin embargo, no fue un artículo con una masificación considerable y no tuvo un despliegue a nivel internacional.
En julio de 2017, la compañía californiana desveló las Google Glass Enterprise Edition, limitadas a ciertos sectores, como su nombre lo indica, lo cual tampoco garantizó su permanencia.
“Gracias por más de una década de innovación y colaboración. A partir del 15 de marzo de 2023, ya no venderemos las Glass Enterprise Edition. Continuaremos dándoles soporte hasta el 15 de septiembre de 2023”, se lee en el sitio oficial del dispositivo.
La pregunta que surge es: ¿esto fue todo por parte de Google en el terreno de las gafas inteligentes?
El caso de Magic Leap
Magic Leap no deja de llamar la atención de propios y extraños; lo cierto es que cada vez se aleja más del consumidor final para centrarse en un conjunto de industrias con el fin de ofrecerles soluciones de RA. Las ventas del visor Magic Leap 1 (2018) no fueron lo esperado, uno de los motivos del cambio de dirección.
En septiembre de 2022 se realizó el lanzamiento de las Magic Leap 2, supervisado por la directora Peggy Johnson, quien ya ha mencionado una nueva posible fuente de ingresos para la empresa, desde licenciar la propiedad intelectual de esta hasta “utilizar nuestro proceso de fabricación patentado para producir ópticas para otros que buscan lanzar sus propias tecnologías de realidad mixta”.
Recientemente, trascendió que Meta estaría interesada en colaborar con Magic Leap, lo que incluiría la fabricación por contrato en América del Norte con la intención de construir productos de RA convencionales.
“El impulso del metaverso ha continuado incluso cuando la empresa se ha visto afectada por condiciones macroeconómicas difíciles y una caída publicitaria, lo que llevó a Zuckerberg a ordenar la reestructuración y el despido de uno 20,000 empleados, como parte de lo que ha llamado su ‘año de la eficiencia’”, apuntó Financial Times.