Google estaría considerando la posibilidad de agregar un bloqueador de anuncios publicitarios como una función predeterminada en todas las versiones de su navegador Chrome, de acuerdo con un nuevo informe.
Si bien esto podría parecer una herramienta valiosa en el intento de un navegador para mantenerse competitivo, ha tomado a mucha gente por sorpresa. Y es que siendo la mayor compañía de Internet en el mundo, Google podría perder millones en publicidad, en el caso de que esta iniciativa prosperara.
Lo cierto es que los bloqueadores de anuncios siempre han sido polémicos. Si bien es cierto que ayudan a los usuarios a disfrutar de Internet sin las constantes interrupciones publicitarias, suelen afectar a las mismas compañías (las de los anuncios publicitarios) que le están permitiendo a este usuario un acceso gratuito a muchos sitios y servicios. Esta ha sido la base de una constante guerra entre los creadores de anuncios y los desarrolladores de bloqueadores, pero la decisión de Google de apostar por los bloqueadores dejaría perplejos a muchos.
Aunque Chrome ha estado bloqueando el contenido flash de forma predeterminada desde hace unos meses, proporcionar acceso inmediato al bloqueo de todos los anuncios publicitarios—contando con más del 50 por ciento del mercado de los navegadores— afectaría sin duda al mismo Google. No está aún claro si este supuesto plan de Google (siguiendo aquí al WSJ) consistiría en tener habilitado el bloqueador de anuncios de forma predeterminada, o simplemente que esté dispuesto para configurarlo por uno mismo, directamente y en el mismo navegador, en lugar de requerir una extensión de terceros (tipo Adblock Plus).
Google, por supuesto, no ha comentado nada sobre el informe, limitándose a decir a ArsTechnica que simplemente «han estado trabajando estrechamente con la Coalition for Better Ads (Coalición por unos Mejores Anuncios) y otros expertos en industria para explorar las distintas maneras en que Google y otros miembros de la Coalición podrían generar y colaborar en unos mejores estándares de anuncios publicitarios».
La Coalición antes mencionada analiza el tipo de anuncios que más molestan a los usuarios de la web, lo suficiente como para que terminen adoptando bloqueadores. Por ello, podría ser que, en lugar de bloquear todos los anuncios, Google considere bloquear algunos específicos. Las ventanas emergentes, los vídeos de reproducción automática con sonido, los anuncios “pegajosos” y los que no se pueden omitir antes de que finalice una cuenta regresiva, suelen ser clasificados como los peores, o lo que es lo mismo, los más “insoportables”. Quizás Google sólo está considerando bloquear anuncios de este tipo, proporcionando tal funcionalidad opcional directamente a través de Chrome.
También es posible que Google sólo esté “echando una mirada” para adelantarse a la curva. Con una participación tan fuerte en el mercado de navegadores, cualquier bloqueador de publicidad que Google implementara se convertiría de inmediato en el más amplio del mundo, lo que le daría alguna medida de control sobre la tendencia.
En tal caso, podría teóricamente incluir sólo sus propios anuncios, haciendo que los anuncios de Google sean los más destacados. Sin embargo, esto podría ser fácilmente visto como el ejercicio de poder monopólico, dando a las autoridades reguladoras una excusa para intervenir.