Dentro del marco de las Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales que celebra la Iglesia Católica, el Papa Francisco instó a las familias a dejar a un lado sus teléfonos celulares y sus cuentas de Twitter para volver a hablarse.
En su discurso anual difundido hoy, el pontífice aseguró que «El gran desafío al que nos enfrentamos hoy es aprender de nuevo cómo hablar unos con otros, no simplemente cómo generar y consumir información» y agregó que los medios pueden facilitar o complicar la comunicación de las familias, al ayudar a que parientes en lugares remotos se mantengan en contacto pero también permitir que otros se ignoren entre sí.
“Hoy, los medios de comunicación más modernos, que son irrenunciables sobre todo para los más jóvenes, pueden tanto obstaculizar como ayudar a la comunicación en la familia y entre familias”, aseguró el Papa.
«Favorecer la comunicación familiar incrementa el amor y la relación entre hombre y mujer, y entre padres e hijos», finalizó diciendo.