El espacio en donde vivo no es muy grande, pero en el segundo nivel, imposible tener una buena señal wifi. Ahora que estoy trabajando más aquí, decidí instalar una especie de «oficina” en una de las habitaciones del nivel de arriba, pues era el lugar más óptimo para la instalación.
Con la señal de internet –el módem está colocado en la planta baja–, algunos días eran buenos: tenía una velocidad “aceptable”, de 2 Mbps, que para algunos podría ser una grosería. Otros días, la computadora portátil y el wifi eran simplemente como el agua y aceite, no se llevaban, por lo que tenía que bajar al primer nivel, hacerme un espacio y seguir trabajando.
Otra solución «práctica» era usar mis datos móviles para conectar mi computadora a la red, pero eso tiene sus riesgos, ya que estos se pueden agotar rápidamente.
Así que cuando me llegó el extensor de señal wifi de Linksys, el RE7000, sinceramente, me emocioné. ¿Acaso era la hora de tener un buen internet en el nivel de arriba de mi casa? Era momento de descubrirlo.
Una vez que lo desempaqué, me dispuse a seguir las instrucciones para configurarlo y el proceso no fue nada complicado. Al ser un equipo compacto, se puede conectar en cualquier enchufe libre.
Eso sí, se debe instalar en una habitación donde la señal wifi local tenga un alcance favorable, por lo que quedó automáticamente descartado el cuarto donde trabajo. Opté por ponerlo en la habitación contigua, donde mi celular reportaba una velocidad de 10 Mbps (pensé: si esta se replica en mi “improvisada oficina” con el extensor, estaré más que contento), tal vez por estar más cerca –en un nivel paralelo– del módem de mi proveedor.
El Linksys RE7000 ofrece la posibilidad de configurarse a través de Wi-Fi Protected Setup (WPS), un botón que incluyen algunos módems y que es una forma simple de conectar equipos, ya que no se necesita introducir la contraseña dispuesta para la red local.
Si el módem que se desea comunicar con el extensor no tiene este botón, se deberá hacer el proceso de forma manual, por lo que es importante tener la contraseña de la red local.
Ahora, en la configuración –como el extensor de Linksys es dual band– se da la opción de configurar dos redes: 2.4 y 5 GHz. La recomendación es que se establezcan las dos (el proceso es prácticamente el mismo).
Para que quede más claro: estos números hacen referencia a diferentes frecuencias inalámbricas. Mientras que 5 GHz tiene un rango más corto, en comparación con 2.4 GHz, esta última suele estar más congestionada. Asimismo, no todos los dispositivos son compatibles con el canal de 5 GHz.
En mi caso, mi computadora portátil funciona mejor en 5 GHz. Con 2.4 GHz, simplemente, no logra establecer el enlace. Entonces, pese a que cada una de las frecuencias tiene pros y contras, lo mejor es probar ambas, con el fin de saber cuál responde mejor en cada gadget.
Cambio de velocidad evidente
Ya una vez que quedó configurado el extensor Linksys RE7000, llegó la hora de hacer las pruebas. Primero, el cambio en la velocidad sí es más que evidente. En mi lugar de trabajo, pasé de tener 2 Mbps –lo que consideraba un día bueno– a 31 Mbps (la velocidad final que consiga cada uno dependerá del plan que se tenga contratado con el proveedor de Internet).
¿Cómo se traduce esa velocidad? Antes de tener el extensor, imposible reproducir Netflix o navegar por una de mis aplicaciones favoritas, TweetDeck, por ejemplo. Ahora, si adelanto o atraso algún episodio en la plataforma de streaming, no hay ninguna complicación, la reproducción es inmediata y se da en buena calidad de imagen.
La respuesta en sitios web también es favorable: tanto el contenido como las imágenes se despliegan rápidamente, como no lo había visto en mucho tiempo.
Con respecto a las videollamadas –regularmente realizo un par cada semana–, sí tengo una queja. Me ha pasado, en más de una ocasión, que la conexión no se mantiene, por lo que he visto interrumpidas algunas de mis reuniones virtuales; tengo que volver a enlazarme (una vez que me conecto por segunda vez, curiosamente, ya no se interrumpe la videollamada).
Por lo demás, estoy sorprendido por la capacidad que ofrece el extensor Linksys RE7000. Además de ampliar el wifi local, intensifica en gran medida la velocidad de conexión, lo cual agradecerán aquellos que ahora necesitan trabajar en casa sin contratiempos.
Conclusiones
Especialmente en México, aunque se tenga una casa pequeña, siempre habrá habitaciones o lugares en los que la señal de internet será débil o inexistente. Para esta situación, lo mejor es considerar un extensor wifi.
El Linksys RE7000, además de ser fácil de instalar y configurar, sobresale por ser dual band, lo que lo vuelve un dispositivo más flexible, listo para “echar a andar” aquellos gadgets compatibles con la frecuencia de 5 GHz.
Su precio es de $130 dólares, lo cual podría resultar un poco caro para algunos. Sin embargo, te podemos decir que vale la pena la inversión, ya que nada se compara con realizar actividades en línea de productividad y entretenimiento sin interrupciones y, claro, sin tener que echar mano de los datos móviles.