No necesitas salir de vacaciones para darte cuenta que, hoy en día, en cualquier sitio turístico importante encontrarás a muchas personas estirando los brazos y sosteniendo un teléfono, o incluso balanceando el palito de la selfie o “selfie stick”, mientras intentan tomarse una foto frente a cualquier atracción popular que estén visitando.
Lo que probablemente no veas cotidianamente es una pelea a golpes entre dos personas que intentan obtener esa selfie perfecta. Pero eso fue exactamente lo que sucedió la semana pasada en la famosa Fontana de Trevi en Roma, Italia.
Según el departamento de policía de Roma, el problema comenzó cuando una mujer holandesa de 19 años y una italoamericana de 44 años se empujaron y cayeron, mientras luchaban por lo que aparentemente era el lugar ideal para tomarse una selfie frente a la icónica fuente.
Las fotos publicadas en la página de Facebook del departamento de policía describen a las dos mujeres «abofeteándose y golpeándose» entre sí. Pero el problema no se detuvo allí. Claramente molestos por el altercado, los miembros de ambas familias se amontonaron, convirtiendo la disputa en una batalla, y ofreciendo a los turistas un espectáculo que sin duda relegó a la famosa fuente a ser la segunda cosa más interesante en los alrededores.
Un total de ocho personas participaron en la pelea, que solo finalizó cuando agentes de policía llegaron a la escena para separar a las familias. «La intervención de los agentes puso fin a una disputa que podría haber generado consecuencias y lesiones mucho más graves a las personas presentes», dijo la policía.
Según los informes, la pugna duró «unos minutos» y causó heridas leves a los involucrados, sin embargo, miembros de ambas familias recibieron citaciones por el episodio. A la luz del incidente reciente, existe la posibilidad de que las autoridades locales consideren prohibir los selfies en el sitio famoso, una medida que ya fue propuesta en varias ocasiones.