Las cámaras análogas son un vestigio para la gran mayoría, pero Fujifilm no quiere que se pierda la emoción de revelar una foto en papel. Por ello, anuncian la Instax Mini Evo, una nueva cámara híbrida que saca fotos digitales y las imprime.
La Mini Evo es, según Fujifilm, el modelo de tope de línea de las Instax. Incluye una pantalla LCD de 3 pulgadas, 10 efectos de lente y 10 efectos de rollo fotográfico, que se pueden seleccionar y combinar mediante un sistema tipo rueda como las antiguas cámaras análogas, cuyas funcionalidades se controlaban de manera mecánica.
El sensor de la cámara permite capturar fotos a 2,560 x 1,920 pixeles, en formato JPEG, que se almacenan en una memoria interna o en una tarjeta microSD externa. Y las imágenes reveladas (o mejor dicho, impresas) tienen una resolución de 1,600 x 600 puntos al hacerlo directamente desde la cámara, u 800 x 600 si se hace mediante la aplicación para teléfonos móviles.
Además, la cámara cuenta con una batería interna de ion-litio, aunque no se revelaron sus especificaciones y solo se menciona que se carga a través de un cable USB tipo B. Reabastecer la batería por completo puede tomar hasta tres horas y con una carga se pueden imprimir 100 fotos como máximo.
Por fuera, la Instax Mini Evo tiene un diseño elegante y sobrio, que recuerda a las antiguas cámaras analógicas. Cabe mencionar que, en general, la línea Instax no es la que mejor calidad de imagen entrega, pero por sus características tampoco está enfocada en un público exigente o profesional.
La cámara se lanzará en Japón el 3 de diciembre de 2021 y en Estados Unidos en febrero de 2022, a un precio de $200 dólares.