Urano y Neptuno tienen un campo magnético “completamente torcido” que podría deberse a la estructura interna de ambos planetas.
Se trata de campos magnéticos que están fuertemente inclinados respecto a los ejes de rotación del planeta y desplazados del centro físico. Por años, esto ha constituido un verdadero misterio para las ciencias planetarias.
Según teorías tradicionales, este particular campo magnético es causado por las circulaciones en una capa convectiva que consiste en un fluido eléctricamente conductor.
Bajo los mismos postulados, “esta capa convectiva a su vez rodea una capa no convectiva de capas estables en la que no hay circulación del material debido a su alta viscosidad y por lo tanto, no hay contribución al campo magnético”.
Simulaciones por computadora han mostrado que el agua y el amoníaco, los principales componentes de estos planetas, entran en un estado inusual a presiones y temperaturas muy altas.
Nuevos estudios
Dos investigadores del Departamento de Ciencias de la Tierra de Escuela Politécnica Federal de Zúrich aseguran estar más cerca de develar el misterio relacionado con Urano y Neptuno.
Tomoaki Kimura y Motohiko Murakami han realizado experimentos de alta presión y temperatura con amoníaco en su laboratorio. En sus mediciones descubrieron una nueva fase de amoníaco superiónico que presenta una elasticidad similar a la de la fase líquida.
Según ellos, esta nueva fase podría ser estable en el interior profundo de Urano y Neptuno, y por lo tanto, ocurrir allí.
Eso sí, el amoníaco superiónico se comporta como un líquido, así que no sería lo suficientemente viscoso como para contribuir a la formación de la capa no convectiva.
Ahora, para estos investigadores sería más urgente descifrar cuáles son las propiedades que tiene el agua superiónica dentro de Urano y Neptuno, en especial porque consideran que podría llevar a resolver por qué ambos planetas poseen un campo magnético tan irregular.