Este año se cumple un cuarto de siglo de presencia humana continua a bordo de la Estación Espacial Internacional (EEI), y para conmemorar la ocasión, la NASA publicó el miércoles una visita guiada en vídeo por esta obra maestra de ingeniería e innovación. Puedes verlo a través del reproductor incrustado en la parte superior de esta página.
El recorrido de 15 minutos por la estación espacial, presentado por los astronautas de la NASA Nicole Mann y Kjell Lindgren, fue grabado en 2022 cuando las misiones SpaceX Crew-4 y Crew-5 de la NASA estaban a bordo del puesto orbital.
Mientras la cámara se desliza por la EEI en condiciones de microgravedad, aparecen ventanas emergentes que explican cada sección de la instalación multimodular y para qué se utiliza.
La estación orbita la Tierra a una altitud de alrededor de 250 millas, dando vueltas alrededor de nuestro planeta aproximadamente cada 90 minutos, lo que hace que los astronautas experimenten 16 amaneceres y atardeceres cada 24 horas.
La NASA describe la EEI como «más grande que una casa de seis dormitorios.» De extremo a extremo, mide 357 pies (108 metros), o aproximadamente el tamaño de un campo de fútbol americano, y en su interior encontrarás seis dormitorios, tres baños, un gimnasio y un montón de instalaciones de investigación.
Los astronautas suelen permanecer a bordo de la estación durante unos seis meses, durante los cuales trabajan en investigación científica mientras disfrutan de vistas increíbles de la Tierra y más allá.
En tiempos normales, la tripulación suele estar compuesta por unas seis personas, incluyendo estadounidenses, rusos, europeos, japoneses y, más recientemente, astronautas de otros países han estado de visita como parte de misiones privadas.
Aunque nunca se han reportado muertes a bordo de la EEI, la instalación ha enfrentado ocasionalmente momentos peligrosos. En 2021, por ejemplo, se ordenó a los astronautas que buscaran refugio en sus naves espaciales durante un corto periodo cuando se avistaron restos espaciales acercándose hacia ellos. Afortunadamente, la EEI evitó cualquier daño y los astronautas pudieron continuar con sus tareas.
Cabe destacar que la instalación solo tiene unos seis años más para funcionar. Su estructura envejecida y sus altos costes de mantenimiento significan que alrededor de 2030, la EEI será despejada de astronautas y empujada hacia la Tierra, donde se quemará en su mayor parte en la atmósfera terrestre.
La buena noticia es que la NASA está colaborando con empresas privadas para construir nuevas estaciones espaciales, de modo que los astronautas de EE. UU. y otros países puedan seguir viviendo y trabajando en órbita terrestre baja.