Un equipo de ingenieros de la NASA comenzó una importante y arriesgada maniobra para reparar el telescopio espacial Hubble, que dejó de funcionar en junio de este año.
Según los encargados, el problema podría estar relacionado con la unidad de control de energía que da un suministro de voltaje constante a la computadora de carga útil.
Por lo mismo, los ingenieros comenzaron este jueves 15 de julio a cambiar su equipo a una unidad de energía alternativa. Los profesionales también han indicado de que se trata de una maniobra arriesgada, que podría devolver al Hubble a sus observaciones científicas en apenas unos días.
“Creo que van a tener éxito, pero eso no está garantizado”, señaló Paul Hertz, director de la división de astrofísica de la NASA.
El telescopio está fuera de línea desde el 13 de junio, cuando inesperadamente dejó de funcionar. Desde ese momento, los ingenieros han realizado toda clase de pruebas y diagnósticos para averiguar el origen de este fallo.
Esta semana, los encargados descubrieron que el mal funcionamiento se podía deber a un regulador de energía defectuoso.
El factor de riesgo pasa porque la unidad que funciona mal está vinculada a muchos otros componentes y sistemas de control, que forman parte de los instrumentos científicos del telescopio.
La NASA tiene que cambiarlos todos. Así, una vez que se complete esta operación, las piezas involucradas ya no tendrán copias de respaldo en caso de un error a futuro. Si esto llega a suceder, podría significar el fin definitivo del telescopio espacial.
“No puedes ver la nave espacial, no puedes ver cómo sucede. Tienes que asegurarte de que tus cargas de comandos harán exactamente lo que pretendes que hagan”, agrega Hertz.
“No querrás apagar por error el receptor de radio. No conviene cambiar accidentalmente una batería que no está lista para cambiarse… Simplemente, no queremos romper nada por accidente”.