Una de las grandes diferencias entre Game of Thrones y House of the Dragon, es que la primera se tomó más licencias creativas de la obra de George R.R Martin y siguió más allá de la historia original, mientras la segunda que se reanudará este 16 de junio en Max, tiene un final ya establecido, lo que sucede es que hay que saber contar y mostrar ese camino.
Y eso es parte de lo que contó y explicó en rueda de prensa el showrunner de la serie, Ryan Condal.
«Ahora sabemos dónde vamos a terminar esta historia en particular», dijo a un grupo de periodistas, «Cuando digo terminado, solo me refiero a bajar el telón, porque, por supuesto, la historia avanza durante otro montón de décadas hasta la caída de la dinastía Targaryen, que es realmente el final de la historia, cuando el Rey Loco cae y Robert Baratheon derroca el Trono de Hierro».
Haciendo referencia a una publicación del blog de Martin de 2022 que describe un plan de cuatro temporadas para Dragons, Condal dijo: «Todavía no estoy listo para hablar sobre cuántos episodios o temporadas necesitamos. Ya sabes, tenemos que llegar allí. Pero ahora sé, después de haber pasado por el proceso de escribir y romper la segunda temporada y saber hacia dónde vamos en la tercera temporada, que tenemos un buen plan, y conocemos la hoja de ruta y cómo llegar allí».
Condal además agregó sobre lo que se viene en la serie que, «creo que el mundo de la serie se expande naturalmente a medida que salimos del mundo de la primera temporada a la segunda», explicó Condal. «Todavía se trata de esta familia tan complicada y de todos los múltiples puntos de vista que hay en ella. Pero como verán, hay una razón particular por la que estamos comenzando a incorporar a estos otros personajes de la vida fuera de la cancha a la historia a medida que se desarrolla la temporada; Así que estad atentos, hay una buena razón para ello. Pero a nivel dramático, siempre me resulta interesante humanizar a la gente pequeña, porque son los que más sufren cuando los nobles en sus altos castillos se van a la guerra. Viven una vida muy dura que es una especie de precaria en el mejor de los casos. Y, ciertamente, una vez que llegan las presiones de la guerra, eso cambia y ejerce presión sobre las personas que viven en las estribaciones de Desembarco del Rey».