Nicolas Cage fue uno de los actores de acción más populares de los noventa y comienzos de los años dos mil.
Por esos años era común verlo como protagonista de algunas de las películas más importantes del género. Sin embargo, una serie de malas decisiones (quiénes somos nosotros para juzgarlo) lo terminaron alejando de las principales producciones, obligándolo a aceptar cualquier papel que le ofrecieran.
Así, en el último tiempo, el pobre Nicolas ha realizado una larga y olvidable lista de películas que siguen alejándolo, peligrosamente, de la gran figura actoral que alguna vez fue y que lo llevó a ganar un Oscar al mejor actor por su papel en Leaving Las Vegas.
Como sea, Cage es una suerte de ídolo caído en desgracia que sigue dándonos de qué hablar, como su próxima aparición en Jiu Jitsu, una película, que, francamente, no necesitamos, pero que alguien consideró pertinente filmar.
En esta entrega, Nicolas Cage lidera a un grupo de luchadores de artes marciales que deben enfrentar a unos peligrosos guerreros alienígenas que viajan frecuentemente para destruir la Tierra.
Lo curioso es que estos alienígenas también saben de artes marciales, probablemente han aprendido de los humanos durante todos los enfrentamientos, ya que los visitantes del espacio viajan cada seis años a la Tierra y nunca han podido cumplir con su objetivo, ¿será esta la excepción?
Eso es, precisamente lo que debe evitar Cage, una suerte de guerrero hippie y loco, pero con un vasto conocimiento y habilidad en la técnica de los luchadores Jiu Jitsu.
Acorde a los tiempos, la película incluye una exagerada cantidad de efectos especiales, mucha acción y una necesaria dosis de humor, porque se sabe que no hay nada más entretenido que enfrentar a peligrosos guerreros extraterrestres cuando el futuro de la humanidad está en juego.
La cinta debería ser estrenada el 20 de noviembre tanto en cines como en formato digital.