Uno de los temas que más ha generado polémica en el contexto de la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus son las mascarillas. Están aquellos que se han manifestado por no ponérsela –o no hacerlo todo el tiempo– contra los que abogan por usarla en cualquier espacio, tanto para protegerse a ellos mismos como a los demás.
¿Qué dice el máximo organismo de salud a nivel internacional, la Organización Mundial de la Salud (OMS), sobre este tema? Al parecer, lo tiene claro: las mascarillas son parte de la solución, aunque no la principal medida para evitar los contagios. “El uso de mascarillas debe formar parte de una estrategia integral que incluya medidas destinadas a eliminar la transmisión y salvar vidas; la utilización de una mascarilla no basta para proporcionar un nivel adecuado de protección contra el COVID-19”, enfatiza.
Refiere que también es imprescindible mantener una distancia social —física— mínima de un metro, lavarse las manos frecuentemente y evitar tocarse la cara y la mascarilla.
Con relación a las que están hecha de tela, indica que existen escasas pruebas de su eficacia, por lo que no aconseja su uso generalizado por la población como medida de control del COVID-19.
“Sin embargo, la OMS recomienda a los gobiernos que fomenten la utilización de mascarillas higiénicas de tela por la población general en áreas donde la transmisión sea generalizada, así como donde también exista una capacidad limitada para aplicar medidas de control y, especialmente, en entornos donde no sea posible mantener una distancia física de al menos un metro, como en medios de transporte público, tiendas u otros lugares cerrados o concurridos”, advierte.
Por ello es importante saber cuáles son las disposiciones sanitarias y la posición en particular sobre el uso de la mascarilla en cada país o región.
En cualquier caso, las mascarillas más “peculiares” están en #WearaDamnMask.
¿Qué es el #WearaDamnMask?
Este movimiento o challenge se suscitó en Estados Unidos a través de la diseñadora Tory Burch, y pretende impulsar el uso de la mascarilla en espacios públicos para detener la propagación de los contagios por el nuevo coronavirus. “Queremos protegernos y, más importante, queremos proteger a los otros”, apunta Burch.
Llamado #WearaDamnMask (algo así como “usa la maldita máscara” en español), es respaldado por un sinfín de usuarios, así como por todo tipo de personalidades de la música y la televisión. Incluso, algunos se fueron al extremo de usar mascarillas que están entre lo bizarro y lo peculiar.
Al hacer un recorrido por esta etiqueta en Instagram, donde Burch hizo la publicación original del challenge, dio tiempo de hacer una selección de algunos de los ejemplos más osados. La pregunta es: ¿quién más se atrevería a usar estos diseños?
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