La firma de productos de robótica de consumo y entretención, Sphero, y que hace unos años se aliaron con Disney para crear la línea de juguetes de la nueva trilogía de Star Wars de JJ.Abrams, ahora tendrán clientes bastante diferentes a los niños.
La compañía que destacó por los androides BB-8 y el clásico R2-D2, ahora se encargará de crear robots para el ejercito de Estados Unidos y para unidades policiales.
Esta nueva división de Sphero llevará por nombre Compañía Six (CO6), y adaptará la tecnología desarrollada dentro de su antigua División de Seguridad Pública.
Según un comunicado de prensa, la compañía Six estará «aplicando la experiencia utilizada para llevar al mercado más de 4 millones de robots en Sphero» para crear productos que ofrezcan una «solución robótica ligera pero altamente avanzada que brinde conciencia crítica para aquellos de quienes dependemos la mayoría, incluyendo policías, bomberos, EMT, militares y otros con trabajos peligrosos «.
Sin dar más detalles de estas nuevas creaciones robóticas, se podría inferir por lo que hacen otras compañías del rubro como ReconRobotics y Roboteam, que serán máquinas con reconocimiento facial, cámaras de vigilancia, provistas con esqueletos flexibles y ruedas para arrastrarse por distintas superficies y servir como modelos de exploración.
El acuerdo que mantenía Sphero con Disney se acabó en 2018, luego de desavenencias económicas. Desde ese momento, la empresa estaba trabajando en el campo educativo haciendo robots STEM para programación.
Según la información que recoge The Verge «el ex CEO de la compañía, Paul Berberian se convertirá en presidente de ambas empresas, mientras que el ex director de operaciones de Sphero, Jim Booth, se convertirá en el nuevo CEO de Company Six. Ambos hombres tienen antecedentes militares. En un comunicado de prensa, Booth dijo que la misión de la Compañía Seis era construir «tecnología poderosa y asequible que podamos poner en manos de tantas personas como sea posible».
Los robots y drones en el mundo militar no son nuevos, de hecho ya han debutado en conflictos armados de EEUU en países como Afganistán e Irak. También la policía los ha utilizado en la actual pandemia del coronavirus para resguardar a la población.