Y sobre la noticia de si habrá VAR en la Copa Oro 2019 la verdad es que… No habrá VAR en la Copa Oro 2019. Así de simple. Con la competición ya iniciada, y con polémicas del pasado aún grabadas en las retinas de muchos, no se verá el vídeoarbitraje en la competición futbolística de selecciones más importante de América del Norte.
¿La razón? Pues parece que la Concacaf se toma las cosas con demasiada calma, y si bien asegura haber seleccionado a los mejores silbatos del continente para tal ocasión, estos no estarían aún “preparados” o “familiarizados” con la tecnología, por lo que va a ser mejor no hacer el ridículo y cruzar los dedos para que los árbitros y asistentes de línea tengan un buen día (o noche) y no vuelvan a repetir situaciones tan lamentables como ésta.
“Los árbitros seleccionados representan lo mejor de nuestra confederación en términos de conocimiento del fútbol, capacidad técnica y preparación física”, aseguró Brian Hall, Director de Arbitraje de la Concacaf, al presentar la lista de todos los árbitros presentes en la Copa Oro. Pues tan excelsos no serán, si no están preparados para interactuar con el VAR.
En cualquier caso, el reglamento de la Copa Oro 2019 en ninguno de sus apartados señala algo relacionado con la implementación del vídeoarbitraje. Brian Hall dijo que4 la decisión se tomó porque habría que preparar mejor a los árbitros para esta tecnología. ¿De verdad? Si bien es cierto que el VAR no es todavía algo “obligatorio”, su implementación ya es un hecho en torneos similares como la Copa América (y en donde ya está siendo protagonista).
Además, en ligas de la zona como la Liga MX o la MLS de los Estados Unidos, ya se cuenta con el vídeoarbitraje, y los estadios estadounidenses están acondicionados para esta tecnología. Por ello, la decisión de dejar al VAR fuera de la Copa Oro 2019 sorprende tanto como los motivos esgrimidos.
Lo cierto es que después de los grandes errores cometidos en ediciones pasadas, parecería más necesario implementar el sistema. Siempre ha existido la sospecha de favoritismo con algunas selecciones –Estados Unidos, México y Costa Rica–, las cuales parecen pesar demasiado en la balanza de la Concacaf.
La implementación del VAR resultaba perfecta para despejar dudas y sospechas y, de paso, lavarse las manos con respecto a las decisiones más polémicas.