Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 pasarán a la historia como los más complicados de celebrar. Tras ser cancelados por la pandemia y aplazarse un año, el coronavirus vuelve a manchar la celebración olímpica a dos semanas de su inicio.
Yoshihide Suga, primer ministro japonés, decidió este 8 de julio de 2021 volver a declarar estado de emergencia en Tokio. En los últimos meses, la capital del país asiático ha sufrido una nueva ola de contagios con una tendencia al alza que preocupa a las autoridades. La alerta, que estará vigente hasta el 22 de agosto, coincidirá con la celebración de los Juegos Olímpicos, lo que significa que estos se realizarán a puerta cerrada y sin público.
El nuevo estado de emergencia entrará en vigor el lunes 12 de julio, decisión que, según el mandatario japonés, se tomó con el fin de frenar el aumento de casos de coronavirus en la región. La medida endurecerá las restricciones actuales, en especial las relacionadas con los comercios.
“El número de nuevos casos sigue aumentando en Tokio”, explicaba a los medios el ministro japonés encargado de la gestión del COVID-19, Yasutoshi Nishimura. “Con el aumento del movimiento de personas y la variante Delta que representa ahora alrededor de 30 por ciento de los casos, se espera que los contagios aumenten”.
El país también prolongará el estado de emergencia en la región de Okinawa (al sudoeste del país) y mantendrá algunas restricciones en varias prefecturas colindantes a Tokio como la de Chiba, Saitama y Kanagawa, en la cuales se realizarán competiciones del evento.