Hemos escuchado a usuarios de MacBook Air quejarse de estos modelos no se renuevan con la regularidad necesaria, además de que “no adelgazan lo suficiente” y no son, en definitiva, tan Air como dicen ser. ¿La verdad? Todo lo que se pueda decir a priori en contra de un modelo que viene con un chip M2 no tiene mucha base lógica. Quizá no es tan fina como algunos quisieran, pero es una computadora que, a no ser que necesites una pantalla más voluminosa para editar, realizará todas las funciones y trabajos que le lances.
No hablamos sin saber: conocemos ya la potencia del M1, y todo lo que pueda hacer el M2 nos llena de ilusión. Esto prevalece en nosotros más que la crítica por no hacer una laptop ultrafina.
La clave será siempre el rendimiento, y todo lo demás, a estas alturas, estará demás. Personalmente, una máquina más delgada me resultaría demasiado endeble, y me acomoda mucho más un diseño asible, no tan delgado y angular. Una laptop como la MacBook Air es una que llevarás de un sitio a otro, y ella nunca estará más de una hora en un solo lugar.
Nos gusta que viene en cuatro colores, y aún más que ninguno de esos colores es demasiado estridente. No queremos cosas demasiado formales en nuestras vidas, pero tampoco necesitamos tanto “colorinche” a veces. Creo que Apple presenta un equilibrio cromático que será muy bien recibido en las tiendas.
La pantalla Liquid Retina 13.6” –más grande que el modelo Air precedente–se ve fenomenal, y adivinamos que los gamer serán los que más la disfrutarán, ya que pudimos ver un demo que nos dejó con la boca abierta.
Recordemos que la MacBook Air es –objetivamente– más delgada y liviana, además de ser más rápida, contar con una mejor cámara y una batería que dura todo el día. Todo esto último, evidentemente, tendremos que comprobarlo, pero sabemos que solo Apple es capaz de crear una computadora tan potente con tan poco peso y un diseño sin ventilador.
Quizá la novedad visual más importante de la nueva MacBook Air es la aparición de un puerto de carga exclusivo (MagSafe) que es fácil de conectar, la cual además la protege cuando se cae o pasa a llevar estando conectada. No todos los presentes estuvimos muy entusiasmados con ver este puerto –que recuerda a puertos de carga pasados– y muchos hubiésemos preferido un tercer Thunderbolt en lugar de los dos que aún mantiene. Por su parte, el Magic Keyboard cuenta con una fila de funciones de altura completa con Touch ID y un trackpad Force Touch espacioso que se ve bien y se siente mejor.
En la presentación supimos que el M2 presenta una CPU de 8 núcleos de próxima generación con avances tanto en rendimiento como en eficiencia de núcleos, junto con una GPU que ahora tiene hasta 10 núcleos, dos más que M1. M2 ofrece 100 GB de ancho de banda de memoria unificada y admite hasta 24 GB de memoria unificada rápida, por lo que puede manejar cargas de trabajo aún más grandes y complejas con facilidad. Todo en un diseño esbelto como ningún otro.
Diseñado para acelerar drásticamente los flujos de trabajo de video, M2 también agrega un motor de medios de próxima generación y un poderoso motor de video ProRes para codificación y decodificación acelerada por hardware, por lo que los sistemas con M2 podrán reproducir más secuencias de video 4K y 8K que antes.
Todo lo anterior es bella teoría, y tendremos que pasar horas usándola y sometiéndola a arduos trabajos para comprobar si todo va tan bien como pinta. Pero si una cosa es cierta es que la nueva versión de la MacBook Air nos ha dejado un muy buen sabor de boca.