De todas las comodidades del mundo en línea, el almacenamiento en la nube es el más útil y seguramente al que expresamos menos gratitud. Quien quiera que reconozca la utilidad de tener en el teléfono prácticamente cualquier cosa que pueda poseer una representación digital sabe que la nube es una comodidad indispensable de la vida posmoderna. Y esa comodidad no sería la misma sin Dropbox.
Dropbox es un servicio de almacenamiento en la nube, como una USB en línea en la que se pueden guardar documentos, imágenes y prácticamente archivos de todo tipo. Se puede abrir una cuenta gratis, pero si se requiere más almacenamiento, se debe pagar una cuota mensual o anual.
Los números dicen que actualmente la nube que más sombra da es la de Google Drive. Pero no siempre fue así. De hecho, Google Drive comenzó su dominio en 2012, cuatro años después de que Dropbox capitalizara un mercado que la todopoderosa Microsoft inició en 2007.
En el mismo año que Steve Jobs inició la revolución del iPhone, dos alumnos del Instituto de Tecnología de Massachusetts, Drew Houston y Arash Ferdowsi, anticiparon un mercado que no haría más que crecer en la medida que la revolución del iPhone trascendía a más usuarios con más fabricantes de tecnología de consumo que creaban más teléfonos inteligentes, con Google y su sistema operativo Android como punta de lanza. Su propuesta, la de crear un servicio de alojamiento en servidores disponible para cualquier usuario, incluso sin el pago de una cuota, ganó adeptos y financiamiento de importantes fondos semilla como Y-Combinator, el mismo que capitalizó a fenómenos como Twitch y AirBnB.
Microsoft había iniciado el mismo servicio un año antes con OneDrive. Pero la compañía que todos conocen por Windows erró en apuntar un servicio tan o más eficaz que Dropbox a un segmento de usuarios que ya tenía cientos de gigas de almacenamiento: el de las PC. En contraparte, Dropbox apuntó al mismo segmento de Microsoft y al de los crecientes usuarios de teléfonos inteligentes.
Catorce años después, cuando el número de usuarios de celulares rebasa al de las PC (3,500 millones de smartphones frente a 2,000 millones de computadoras), Dropbox casi triplica el número de usuarios que OneDrive.