Un grupo de investigadores de la Universidad de Nuevo México, publicaron un análisis en Scientific Reports, donde señalan que la minería del bitcoin tiene consecuencias muy negativas para el medioambiente y que a largo plazo es insostenible.
Los autores sugieren que en lugar de ser considerado similar al «oro digital», Bitcoin debería compararse con productos mucho más intensivos en energía como la carne de res, el gas natural y el petróleo crudo.
«No encontramos evidencia de que la minería de Bitcoin se esté volviendo más sostenible con el tiempo», dijo el profesor asociado de economía de Benjamin A. Jones. «Más bien, nuestros resultados sugieren lo contrario: la minería de Bitcoin se está volviendo más sucia y más dañina para el clima con el tiempo. En resumen, la huella ambiental de Bitcoin se está moviendo en la dirección equivocada».
Jones y sus colegas Robert Berrens y Andrew Goodkind presentan estimaciones económicas de los daños climáticos de la minería de Bitcoin entre enero de 2016 y diciembre de 2021. Informan que en 2020 la minería de Bitcoin utilizó 75.4 teravatios hora de electricidad (TWh), un mayor uso de electricidad que Austria (69.9 TWh) o Portugal (48.4 TWh) en ese año.
«A nivel mundial, la minería, o producción, de Bitcoin está utilizando enormes cantidades de electricidad, principalmente de combustibles fósiles, como el carbón y el gas natural. Esto está causando enormes cantidades de contaminación del aire y emisiones de carbono, lo que está afectando negativamente nuestro clima global y nuestra salud», dijo Jones. «Encontramos varios casos entre 2016-2021 en los que Bitcoin es más dañino para el clima de lo que realmente vale un solo Bitcoin. Dicho de otra manera, la minería de Bitcoin, en algunos casos, crea daños climáticos en exceso del valor de una moneda. Esto es extremadamente preocupante desde una perspectiva de sostenibilidad».