“El 99 % de los suscriptores a la televisión paga están encadenados a sus decodificadores a consecuencia de que los operadores de cable y satélite han cerrado el mercado”.
Éstas son las palabras de condena con que la Comisión Federal de Comunicaciones de los Estados Unidos (FCC) inició el comunicado que ha causado pánico entre las empresas proveedoras como VerizonFios, Time Warner, DirecTV y Comcast.
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De acuerdo a lo publicado ayer, los consumidores estadounidenses gastan $20 mil millones al año para rentar dispositivos decodificadores y la falta de competencia significa que los clientes están obligados a gastar un promedio de unos $231 anuales en cuotas de alquiler.
Según un reciente análisis, desde 1994 el costo de renta de la caja decodificadora ha aumentado 185 %, mientras que el precio de las computadoras, los televisores y los dispositivos móviles como teléfonos y tabletas se han reducido en un 90%.
El Congreso ha reconocido la importancia de una economía competitiva de mercado y ha instado a la Comisión realizar una propuesta con normas que garanticen que los consumidores puedan usar el dispositivo que prefieran para acceder a la programación que pagan.
Hoy, Tom Wheeler, el actual presidente de la FCC, circuló una moción que propone abrir el mercado a la competencia y permitir a terceros, fabricar y ofrecer cajas decodificadoras a bajo precio.
«Los consumidores deben ser capaces de elegir cómo acceder a los servicios de TV paga a los que están suscriptos” dice la propuesta.
«Por ejemplo, los consumidores deben ser capaces de tener la opción acceso a la programación a través de la interfaz proporcionada en un decodificador de televisión de pago o si prefieren utilizando una aplicación para acceder a través de teléfonos, tabletas o televisores inteligentes.
“Los proveedores de contenido de pago y sus competidores deberán ser capaces de competir entre sí para que el consumidor pueda elegir libremente basado en su experiencia de consumo, la calidad de la interfaz y el contenido. Además sugiere que los nuevos productos sean lo suficientemente flexibles como para integrarse fácilmente con tecnologías existentes como el sistema de entretenimiento hogareño, el identificador de llamadas (caller ID) y con otras innovaciones futuras».
Los grupos de presión de las compañías proveedoras reaccionaron inmediatamente y en el blog de Comcast la compañía escribió: “El miércoles, el presidente de la FCC Tom Wheeler propuso que los proveedores de TV paga por satélite y televisión por cable debían separar sus servicios para permitir que empresas puedan reenvasar como propios los contenidos, usarlos libremente y sin pagar derechos de autor.
En vez de beneficiar al consumidor como el presidente propone, todas estas medidas traerían como consecuencia un impacto negativo en la creación de contenidos de alta calidad por la falta de incentivos económicos y en definitiva congelaría la innovación.
La discusión para implementar las nuevas medidas se llevarán a cabo en el seno de la Comisión Federal el próximo 18 de febrero y ya algunos miembros han expresado públicamente que “a la industria lo único que le importa es mantener el statu quo, no quieren perderse el negocio de los 20 mil millones de dólares”.