Sí, conocemos bien la experiencia; a uno le añaden a un grupo, casi contra su voluntad (el clásico grupo de excompañeros de la facultad o de padres del colegio), y pronto su móvil entra en una rutina sin fin de mensajes de todo tipo. Que a dónde vas de vacaciones hasta los interminables memes o vídeos; todo tiene cabida en un grupo de este tipo del que uno solo desea salir, pero no puede hacerlo por descortesía.
Pues bien, desde WhatsApp conocen bien este mal y por fin se han decidido a ponerle fin: una nueva actualización de la plataforma mediante la cual se puede evitar que la utilidad de un grupo se vea arruinada por los más locuaces.
La idea es sencilla: en esta nueva versión los administradores podrán especificar quién puede hablar y quién no y no tanto como venganza, sino para conseguir que los grupos vuelvan a ser una eficaz herramienta de comunicación. En concreto, desde WhatsApp en su nota de prensa se habla de aprovechar esta nueva función en “comunidades de vecinos, comunicados del colegio a padres y madres…”.
Se trata, en definitiva, de que los administradores puedan enviar mensajes a grupos en los que el resto de usuarios son pasivos y solo pueden leer estos comunicados. Para activar esta función, basta con ir a la Información del grupo y hacer clic sobre “Configuración del grupo” y seleccionar quién puede escribir y quién no.
Se trata de un sencillo cambio con el que los grupos recuperarán el valor informativo que se requiere unidamente en determinadas situaciones. La nueva funcionalidad se ha llevado a cabo desde la parte servidor del servicio con lo que poco a poco estará disponible para todos los usuarios. ¿Se logrará poner coto a los que no paran de hablar?