Google está preparando el lanzamiento del Pixel 10a, el ansiado modelo de gama media que mantiene la promesa de la compañía de proporcionar excelencia fotográfica y experiencia de software en un precio accesible. Sin embargo, una certificación filtrada de Verizon ha revelado especificaciones que pintan un cuadro de extrema conservadurismo: el Pixel 10a retendrá principalmente las características de su predecesor, el Pixel 9a, con mejoras enfocadas primordialmente en la pantalla.
El Pixel 10a montará un procesador Tensor G4, la misma versión del chipset que se utilizó en el Pixel 9a lanzado hace aproximadamente un año. Esta decisión es particularmente notable considerando que la serie Pixel 10 (los modelos premium lanzados este año) utilizan el nuevo Tensor G5, un chipset que promete mejoras significativas en IA y procesamiento de imágenes. La decisión de mantener el G4 en el modelo económico sugiere que Google es cauteloso respecto a los beneficios reales que el G5 ofrece o que está tratando de maximizar márgenes de ganancia reteniendo costos de producción bajos.
La pantalla será el área primaria de actualización. El Pixel 10a contará con un panel AMOLED de 6,28 pulgadas con resolución FHD+ (2.340 x 1.080 píxeles) y tasa de refresco de 120Hz. Lo particularmente interesante es que se especula que el panel tendrá capacidad de alcanzar hasta 2.000 nits de brillo HDR, una mejora significativa respecto a los paneles del 9a. Este nivel de brillo es particularmente útil para visualización de contenido HDR y fotografía de producto, pero para uso general en exteriores sigue siendo menos importante que la eficiencia energética del panel.
La cámara del Pixel 10a será idéntica a su predecesor. Mantiene un sensor principal de 48MP con apertura f/1,7 acompañado de un ultra gran angular de 13MP con f/2.2. La cámara frontal es de 13MP, una especificación que es apenas adecuada en 2026 cuando los rivales ofrecen sensores de 16-32MP frontal incluso en gama media. La retención de estas cámaras sugiere que Google está canalizando toda su innovación fotográfica a través del software, confiando en que su procesamiento computacional de imágenes puede compensar por especificaciones hardware que no son competitivas en papel.
La batería será de 5.100 mAh con capacidad de carga de 23W. Estos números son prácticamente idénticos a los del Pixel 9a, sugiriendo que Google ha decidido que no hay razón para cambiar una fórmula que funcionó adecuadamente. Sin embargo, 23W se siente significativamente lento en 2026, cuando incluso smartphones presupuestarios como el Samsung A57 ofrecerán 65W de carga rápida. Esto deja el Pixel 10a con un punto débil claro: autonomía mediocre combinada con velocidad de recarga lenta.
El almacenamiento será de 128GB en la configuración base, construido sobre almacenamiento UFS 3.1. Este es un área donde Google parece estar rezagada: la mayoría de fabricantes ya están transitando a UFS 4.0, que duplica los speeds de lectura y escritura. La falta de actualización sugiere costos más bajos pero un dispositivo que se sentirá potencialmente lento al transferir datos grandes o hacer backup.
Lo más significativo será cómo el Tensor G4 en el Pixel 10a afectará el acceso a características de IA de próxima generación. Google ha anunciado características como Magic Cue que requieren el Tensor G5. El Pixel 10a, con su chipset anterior, podría quedar excluido de estas características, creando una fragmentación donde los usuarios de gama media de Google son efectivamente ciudadanos de segunda clase en el ecosistema de Google en términos de acceso a las características de inteligencia artificial que Google está agresivamente expandiendo.
El lanzamiento del Pixel 10a está programado para principios de 2026, probablemente marzo o abril. A este precio (que se espera sea similar al Pixel 9a a aproximadamente $499-549 USD), el Pixel 10a será competitivo respecto a Samsung Galaxy A57 en precio pero significativamente menos competitivo en especificaciones puras. El atractivo del Pixel 10a será su software: Android 16 con características de Pixel exclusivas, garantía de actualización de software, y la reputación de Google en fotografía computacional.