“Sin reclamos para titulares de revistas, va a lo práctico y nos convence con todo su equipamiento. Te gustará si estás dispuesto a prescindir de algunas características.”
- Cámara
- Autonomía
- Diseño esbelto y aspecto premium
- Modo noche mejorable
- Sin resistencia al agua
- Sin 5G
- Sin carga inalámbrica
- Precio
El apellido Lite da la idea de un dispositivo más asequible. Pero eso no significa necesariamente que se trate de un modelo barato. Galaxy S10 Lite es un ejemplo de ello: reduce algunas especificaciones para disminuir el precio envuelto en un chasis con una estética elegante y conservadora. Es un teléfono con buenas prestaciones en general y algunas carencias que debes tener en cuenta.
Diseño y pantalla
Galaxy S10 Lite es uno de los móviles más livianos que hemos analizado. Los 186 gramos (6.56 oz) de peso y un diseño muy delgado (162.5 x 75.6 x 8.1 mm) –sin necesidad de curvar los lados– se traducen en un dispositivo sumamente cómodo en la mano, pese a su pantalla de 6.7 pulgadas.
Por la parte trasera, está vestido con plástico de color azul, algo que ayuda rebajar el precio respecto de los Galaxy S20. Aun así, su aspecto en este tono resulta premium y, a la vez, discreto. Si eres de los que odian las marcas de las huellas dactilares, en este caso también se quedan pegadas, pero no se notan tanto como en otros teléfonos. En esta zona posterior, el smartphone no se queda fuera de la tendencia de los módulos de cámara cuadrados o rectangulares, y alberga tres lentes.
La pantalla FHD+ (2,400 × 1,080p), con 394 ppp, tecnología Super AMOLED Plus y unos biseles mínimos, destaca por su brillo y la viveza de colores (a costa de saturarlos, lo que ayuda a embellecer todo lo que muestra, y nos gusta porque no es un cambio excesivo). Si prefieres colores más realistas, selecciona el modo Natural en Ajustes/Pantalla/Modo de pantalla.
Por lo demás, es un teléfono muy en la línea de otros, con los ajustes de volumen y botón de encendido a la derecha, el puerto USB-C en la parte inferior y la ranura para las tarjetas en el lado izquierdo. No lleva conector jack de 3.5 mm, algo que no debería ser un problema, ya que, en vez de una funda, en la caja incluye unos auriculares (audífonos) con USB-C.
Rendimiento, batería y carga
Por el procesador, un Snapdragon 855 (el mismo que el del Google Pixel 4 XL y el Galaxy Note 10 Plus), la RAM de 8 GB y el precio, este teléfono se encuadra en la gama alta más baja. Este chip no es el más avanzado ya en esta categoría, fue sustituido por el 865 que incluyen muchos de los móviles estrella lanzados en 2020, como los Galaxy S20, Motorola Edge Plus, OnePlus 8 y muchos más. No dispone de lo más avanzado y, sin embargo, nos ha sorprendido la fluidez y la rapidez con que ejecuta todas las tareas. Los 128 GB de almacenamiento dan para muchos contenidos, y lo mejor es que si necesitas más, le pones una tarjeta de memoria y lo incrementas hasta 1 TB más (como máximo).
En principio, deberías estar tranquilo si necesitas autonomía para una jornada laboral con un uso intensivo. En nuestro análisis, con cerca de diez horas de reproducción de vídeo repartidas en dos días, combinada con navegación web y captura de fotos, nos ha dado para más de dos días completos (sin apagarlo por la noche). Y eso que su batería no es de las de mayor capacidad (4,500 mAh).
En carga rápida también se comporta como esperas en un teléfono con un precio considerable. Con un cargador de 25 W, obtienes la mitad de la autonomía en unos 25 minutos, un tiempo que no es de los mejores, claro, y eso no quita para que destaque. Completamente se carga en una media de 65 minutos, y está muy bien, aunque encuentras una velocidad similar en algunos móviles de la gama media más asequible. Entre ellos, Realme 6 y Redmi Note 9 Pro, ambos con precios por debajo de los 300 euros.
Cámaras
Las tres lentes del teléfono fotografían con un gran angular de 48 megapíxeles (y estabilizador Super Steady), un ultra gran angular de 12 megapíxeles y un objetivo macro de 5 megapíxeles. Cierto es que, en lo que se refiere a megapíxeles, no destaca, y tampoco importa. Toma fotos de muy buena calidad. La de los selfies sí apunta alto en resolución con 32 megapíxeles (y también cumple con lo que esperas en un móvil con un precio importante).
Tal vez el punto más flojo de esta cámara es el modo nocturno, sin llegar a ser un problema. En las escenas con algo de iluminación rellena bien y el resultado da la talla. Sin luz, a diferencia de otros teléfonos, no ilumina tanto como para tomar la foto, es necesario recurrir al flash. La función macro, sin ser de las mejores, consigue su objetivo siempre que respetes la distancia recomendada (entre 3 y 5 cm), lo que condiciona el tamaño de los detalles a capturar (no los cap grandes).
En lo que se refiere al zoom, Samsung opta por un máximo de 8x, un número de aumentos por debajo de otras cámaras pero que se comporta bien. Así que se puede aplicar lo de menos en más: lo decimos porque de nada sirve poner 10x o más y que luego las imágenes queden borrosas. Con el máximo de 8x da la talla en fotos, pero cuando lo aplicas en el modo vídeo, no mantiene esa calidad y no enfoca con nitidez.
Si te gusta tomar fotos creativas con el efecto bokeh, el modo enfoque dinámico (equivale al modo retrato en otros móviles) viene con varios desenfoques predeterminados y con una barra para que elijas el grado de borroso del fondo. En los selfies, te permite seleccionar el desenfoque incluso después tomar la foto, y también con la posibilidad de cambiar el color a blanco y negro.
Software
Basado en Android 10 y One UI 2.1 es una de las capas que más nos gustan por su cantidad de detalles. Entre ellos, la posibilidad de crear una pequeña ventana emergente con los iconos de llamadas para poder utilizar la pantalla mientras hablas; ver el contenido del teléfono en la computadora simplemente pulsando el botón Conexión a Windows; y el botón Music Share para conectar con el altavoz de alguien y compartir tu música con solo pulsarlo. En la cámara, la opción de cambiar del modo foto a vídeo pulsando el mismo botón varios segundos y la captura de ráfagas (o GIF) con solo deslizar el dedo de este mismo botón hacia abajo.
Conclusión
Con la misma pantalla del Galaxy S20 Plus e igual de liviano, Galaxy S10 Lite te encajará si buscas un teléfono muy manejable, con una pantalla grande de calidad, una cámara de fotos notable y una buena autonomía. Si es lo que deseas de un teléfono, tendrás que gastarte 659 euros. Por este precio esperábamos la resistencia al agua, ya que Samsung es la marca que más apuesta por esta característica fuera de la gama alta.
Es una cantidad considerable, no al alcance de todos los bolsillos, y nos parece un poco elevado si se compara con otras opciones con mejores prestaciones, al menos sobre el papel: por ejemplo, Realme X3 Superzoom (499 euros) y Realme X50 Pro 5G en su versión de 8 GB y 128 GB (599 euros). Especialmente este fabricante chino está poniendo el listón muy alto a los competidores para conquistar a los usuarios fuera del gigante asiático, aunque Samsung lleva mucho terreno recorrido y habrá quienes prefieran lo que ya conocen y se han acostumbrado a utilizar.
¿Alternativas? Por un importe similar, tienes la opción del Xiaomi Mi Note 10 Pro, Huawei P30 Pro, OPPO Find X2 Neo y Motorola Edge.