Motorola renovó su mítico Defy, un dispositivo que nació en 2010 como uno de los primeros teléfonos resistentes o rugged phones.
El nuevo Motorola Defy tiene certificación IP68 de resistencia al agua y polvo, y además, puede sumergirse hasta 1.5 metros durante 35 minutos. También cuenta con certificación estándar militar MIL SPEC 810H con la que nos asegura soportar caídas desde 1.8 metros de alto sin romperse ninguna de sus partes, ni siquiera la pantalla.
Se trata de un teléfono con una doble carcasa que le ofrece esa hermeticidad gracias a la que resiste tanto bajo el agua, pero que al mismo tiempo hace que sea un móvil pesado (232 gramos) y grueso (11 milímetros).
En lo que a especificaciones técnicas se refiere, el Motorola Defy cuenta con un procesador Qualcomm Snapdragon 662 acompañado de 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento. El dispositivo está alimentado por una batería de 5,000 mAh con carga rápida de 20W. Su cámara principal está formada por un sensor de 48 MP acompañado de un gran angular con sensor de 8 MP, un lente macro y un sensor de profundidad. Su cámara frontal es de 8 MP.
Con estas especificaciones internas está claro que el Motorola Defy entra de cabeza en la gama media, algo habitual en este tipo de teléfonos resistentes como los desarrollados por CAT. En cuanto al precio, este será de 329 euros y el dispositivo se podrá adquirir en las próximas semanas en España y en algunos mercados de América Latina en dos colores, uno negro por completo y otro con una esquina verde. Ambos llegan con una correa de muñeca desmontable.