Nada más sacarlo de la caja, uno ya se da cuenta de que el Huawei Mate 40 Pro es un teléfono de altura por su aspecto premium. La pantalla sumamente curvada y la cámara circular recuerdan al anterior, el rompedor Mate 30 Pro, un telefonazo del que hereda diseño pero con sutiles cambios. Para empezar, Mate 40 Pro se nota un poquito más ancho y robusto. Y a la vez también más pesado, demasiado para nuestro gusto, y mucho más cuando le pones la funda de gel transparente incluida. Y menos mal que trae esta protección, porque el elegante acabado brillante y con efecto espejo de color negro es un imán para las huellas dactilares y las diminutas motas de polvo. Se ensucia excesivamente. Y no solo por la parte de atrás…
Pantalla en cascada, perfecta para interacción
Le sucede lo mismo a su pantalla de 6.7 pulgadas, se ensucia al instante. Este panel OLED llama la atención por su pronunciada forma en cascada, un diseño que propicia el manejo con gestos deslizando los dedos que sustituyen a los botones virtuales de la parte inferior de la pantalla. Estos gestos son muy sencillos y fáciles de llevar a cabo, y los costados así favorecen aún más esta comodidad. Cuando se está configurando el dispositivo por primera vez, un pequeño tutorial explica cómo hacer estos movimientos.
No obstante, para manejar el teléfono no siempre es imprescindible tocar la pantalla: Huawei Mate 40 responde a algunos movimientos en el aire con las manos. Por ejemplo, he probado el que permite activar la pantalla principal simplemente poniendo la mano enfrente de ella y aunque cuesta un poco al principio acertar, cuando le pillas el truco es rápido y puede resultar útil en determinadas circunstancias en las que no quieres tocarla. Eso sí, cuando tienes configurado el lector de huella bajo pantalla, tendrás que tocarla para desbloquearlo, claro.
A diferencia del Mate 30 Pro que no incorporaba un botón físico en el lateral derecho para ajustar el volumen, Mate 40 Pro sí lo trae y me parece un acierto que lo haya vuelto a poner por su gran utilidad. Justo debajo tiene el mismo botón de encendido que su antecesor, el pequeñito de color rojo. Por la parte de atrás, la cámara circular ya no está rodeada con una anillo que la adornaba y el módulo sobresale un poco sin que sea excesivo. Viene con dos altavoces, uno en la parte de arriba y otro en la de abajo, y juntos suenan muy bien. Como ya es habitual en esta firma y serie, no encontrarás un conector jack de 3.5 mm para auriculares.
Equipado con el procesador Kirin 9000 y 8 GB de RAM, no debería dar problemas de rendimiento, ni tampoco de espacio para almacenar un gran número de fotos y videos por sus 256 GB de memoria interna. Si el cargador para la carga rápida de 40 W de los Huawei de gama alta ya era muy eficaz, no me cabe duda de que el de 65 W incluido en el Mate 40 Pro será aún más veloz.
La calidad de la cámara, sobre el papel, debería superar a la de su antecesor que ya tenía una increíble. Y con la ventaja de que este nuevo modelo trae una cámara dual para tomar selfies. En software, los modos Dos Vistas (capta la misma escena desde dos distancias con dos cámaras independientes) y Creador de Historias (une varios videos cortos en una pieza con plantillas, música y filtros) invitan a tomar fotos y videos para compartirlos de inmediato con familia o amigos. Viene con estabilizador de imagen (Steady Shot) para grabar video al estilo de una cámara de acción.
Búsquedas a partir de imágenes con Petal Search
El buscador Petal Search da la posibilidad de realizar búsquedas por imágenes. Así, al tomar una foto de un gel hidroalcohólico y realizar una búsqueda, me aparecía algún producto de este tipo pero la gran mayoría eran imágenes de diferentes cosméticos. Al tomar una foto de la caja de unos auriculares con un diseño similar a los AirPods, además de ese producto en concreto, también mostraba otros auriculares con el mismo diseño, entre ellos los de Apple.
En ausencia de los servicios de Google, Huawei Mate 40 Pro integra herramientas como Link Know, una aplicación de mensajería instantánea para trabajo colaborativo (de grupos de educación o empresariales) similar a Zoom, para intercambiar mensajes de texto, organizar reuniones, transmisión en vivo y enseñanza en línea. Preinstaladas vienen las conocidas apps TikTok y Snapchat.
Conclusión
Su diseño no me ha sorprendido como sí lo hizo el primer Mate 30 Pro, porque es muy similar al de este. La estética del anterior me parece más atractiva: la ausencia del aro o anillo de alrededor de la cámara y ser más ancho y menos estilizado le hacen menos bonito que su antecesor. Aun así, se ve elegante y premium. Su pantalla sigue atrayendo por su calidad y lados curvos. En la mano, se siente un pelín pesado pero tampoco supone un problema.
A falta de probar la cámara en profundidad, sí que puedo afirmar que es muy completa y versátil y que debería superar a la del Mate 30 Pro, aunque el listón está muy alto. Podrás conocer muchos más detalles de este teléfono muy pronto en una review.