Una grave acusación salió informada en el Wall Street Journal, ya que dice relación con que funcionarios federales de Estados Unidos expresaron que Huawei estaba generando una extensa red de espionaje mundial a operadoras móviles.
Según lo revelado, la compañía china está usando puertas traseras en los equipos que construye, específicamente desde 2009 cuando comenzó a distribuir los primeros dispositivos con 5G.
«Tenemos evidencia de que Huawei tiene la capacidad de acceder secretamente a información confidencial y personal en los sistemas que mantiene y vende en todo el mundo», dijo el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Robert O’Brien al WSJ.
Un funcionario de Huawei comentó en el mismo reportaje que esa información es completamente falsa, ya que la compañía china «nunca ha hecho y nunca hará nada para poner en peligro a sus clientes», este mismo funcionario agregó que las puertas traseras de las fuerzas del orden estaban «estrictamente reguladas» y solo podían ser utilizadas por personal certificado. Los trabajadores de Huawei necesitan una «aprobación explícita», dijo el funcionario, y afirmó que cualquier intento de usar esas puertas traseras sería fácilmente detectado».
El jefe de seguridad de Huawei, Andy Purdy, también salió a desmentir lo dicho por los funcionarios estadounidenses en The Verge.
«Negamos enérgicamente la acusación de que conservamos dicha capacidad. También negamos que alguna vez hayamos accedido incorrectamente a la información del cliente o datos del cliente».
Purdy fue más allá con sus dardos contra la administración de Donald Trump.
«Estados Unidos está comprometido con esto, y creo que realmente se debe a la situación geopolítica entre China y Estados Unidos. Estados Unidos no está dispuesto a considerar los hechos y la evidencia, y van a hacer todo lo posible para bloquear nuestra capacidad de proporcionar productos a las redes de comunicación de todo el mundo», sostuvo.
Esta situación además tiene en alerta al gobierno de Trump, que pidió explícitamente al Reino Unido por ejemplo, que no construya redes 5G en su país con los chinos y esta alarma también la ha extendido a otros países, sobre todo en Latinoamérica, donde Beijing ha tenido una alta influencia económica.