Google y Huawei están ofreciendo pagar $9.75 millones de dólares para resolver una demanda colectiva en su contra por parte de los propietarios del teléfono Nexus 6P, lo que podría significar $400 dólares para cada uno de los usuarios afectados. El acuerdo, que debe ser aprobado por el tribunal antes de que entre en vigencia, se centra en el problema de bootloop que causó que los teléfonos afectados se reiniciaran al azar, independientemente del nivel de batería.
La demanda alega que las acciones de Google y de Huawei infringieron la garantía del dispositivo, y afirma que, aunque ambas compañías estaban al tanto del error, ninguna empresa tomó medidas para reconocerlo públicamente, o dejó de vender dispositivos que pudieran ser víctimas del problema.
Las autoridades tomaran una decisión el 9 de mayo, lo que significa que cualquier persona que haya comprado un Nexus 6P en los Estados Unidos antes del 25 de septiembre de 2015 puede presentar un reclamo, y los detalles sobre cómo hacerlo se pueden encontrar en el documento de aviso de esta situación.
Ten en cuenta que la elegibilidad para el reclamo es bastante rigurosa, y es probable que solo aquellos que puedan presentar la documentación adecuada del error se acerquen al límite de $400 dólares. Aquellos sin documentos que prueben el error probablemente solo serán elegibles para recibir $75 dólares, mientras que aquellos que aceptaron la oferta de Google de un Pixel XL en reemplazo solo serán elegibles para recibir $10. Aún así,vale la pena intentarlo.
Es un final triste para un dispositivo que se consideraba un buen teléfono de gama media. Creado bajo el programa Nexus de Google, que otorgó licencias a los fabricantes de hardware para crear dispositivos con Android en estrecha colaboración con Google, el Nexus 6P fue el resultado de una asociación entre Google y Huawei, y resultó en un teléfono que fue aclamado como “el mejor Nexus”. Desafortunadamente, también fue el último Nexus, ya que el programa fue reemplazado por la gama Pixel, lo que hizo que Google tomara un control más firme de las riendas de fabricación y cambiara los niveles de precios a niveles emblemáticos.
Este no es el primer teléfono Nexus que enfrenta problemas legales a través de bootloops. El Nexus 5X, construido por LG, también enfrentó demandas colectivas, mientras que otros dispositivos LG también vieron acuerdos similares debido al mismo problema. La esperanza es que esta saga de problemas para dispositivos Android finalmente haya llegado a su fin, y que hayamos visto el final del temido bootloop.