El Artura llega al mercado como el primer auto de producción de la serie de Alto Rendimiento Híbrido (HPH) de McLaren. Si bien ya existen el Speedtail y el P1, estos se sitúan en un segmento superior.
Con el Artura, la marca también experta en deportes aplica lo aprendido durante estos años en sus hermanos mayores, por lo que logra un superauto acorde a las tendencias del mercado y que no pierde un ápice de deportividad: entrega un total de 671 caballos de potencia y 531 lb-ft de torque, suficientes para prestaciones de impacto.
Gracias al uso extensivo de carbono, que se puede apreciar mejor en la nueva arquitectura ligera de fibra de carbón de McLaren (MCLA, por sus siglas en inglés), el Artura logra un peso por debajo de los 1,400 kilogramos, algo que le ayuda para tener un rendimiento ejemplar y lograr los 62 mph en solo 3 segundos y las 124 mph, en 8.3. La velocidad máxima es de 205 millas por hora.
La MCLA está diseñada para poder llevar el tren híbrido; por debajo se encuentran las baterías de iones de litio, mientras que en la parte trasera va el motor de 3.0 litros con seis cilindros en V a un ángulo de 120 grados, suficiente para dar cabida a los dos compresores.
El motor eléctrico aporta al conjunto 95 caballos y 165 lb-ft, además de dar la opción de modo completamente electrificado con una autonomía de 18 millas (29 kilómetros) y una velocidad máxima de hasta 81 mph (130 kph). El peso de este sistema ha logrado quedar en solo 33 libras, lo que significa una gran mejoría respecto a, por ejemplo, el usado en el P1.
La transmisión también es completamente nueva y fue diseñada en específico para el Artura; se usa una de ocho velocidades con doble embrague, la potencia va dirigida al eje trasero y los modos de manejo que ofrece son cuatro: eléctrico, confort, deportivo y pista. Punto interesante es que la caja no cuenta con engranaje de reversa: la función se realiza con el motor eléctrico.
Las ruedas son de 19 pulgadas pare el eje delantero y de 20 para el trasero, y están cubiertas por llantas Pirelli fabricadas en específico para el Artura: miden 235 mm adelante y 295 mm atrás.
Estas cubren discos cerámicos de 390 mm al frente y de 380 mm en la parte posterior, con pinzas de seis y cuatro pistones respectivamente. Logran frenar desde 62 mph hasta cero en solo 101 ft.
El interior no niega su origen, deja ver en forma clara que es un McLaren con un volante sin botones como suele suceder en la marca, una pantalla central de ocho pulgadas colocada de manera vertical y debajo de ella los interruptores que hacen la función de selector de cambios y encendido del motor.
El clúster de instrumentos está fijo con la columna de dirección; de esta manera, al ajustar tu posición de manejo, tendrás siempre a la vista todos los indicadores. Detrás del volante están las manetas de cambio, y sobre tu mano derecha, al extender tus dedos índice y medio, puedes acceder a los ajustes dinámicos del auto.
Con prestaciones de superauto, posibilidades eléctricas, y grandes innovaciones para el segmento y la marca, el Artura puede ser “parteaguas” para el futuro de McLaren, ahora con autos híbridos de altos vuelos.