Para aumentar la protección de la cabeza de los pilotos, los organizadores de la Fórmula Uno están a punto de hacer un cambio importante en la apariencia de los autos de carreras.
La Federación Internacional de Automóviles (FIA) ha estado evaluando el uso de dos dispositivos que ayudan a proteger a los pilotos de distintos objetos voladores que podrían golpear sus cabezas: el «halo» y el «escudo”. Después de probar ambos, la organización ha confirmado que el halo será obligatorio el próximo año, según hemos podido saber a través de un comunicado de la FIA. La decisión final viene justo después de que una prueba con el «escudo» no arrojase buenos resultados.
El halo es un aro redondo que rodea la cabina, apoyado por un puntal. Nunca fue una solución “estéticamente agraciada”, razón por la cual la FIA propuso la alternativa del escudo, el cual era —básicamente— un parabrisas injertado en la cabina. Este escudo fue probado por el piloto de Ferrari, Sebastian Vettel, en el Gran Premio de Gran Bretaña de la semana pasada.
Pero mientras que el escudo puede verse “más bonito” que el halo, Vettel se quejó de mareos aparentemente relacionados con la superficie curvada del escudo, de acuerdo con Racer. Parece que esta opinión fue determinante para que la FIA optase finalmente por el halo para la temporada 2018. La organización había decidido introducir algún tipo de protección adicional en la cabina el próximo año, aunque hasta ahora no se sabía cuál sería.
Las pruebas de halo/escudo han sido controvertidas en los paddocks de la F1. La seguridad de los conductores es una preocupación importante, pero algunos han cuestionado si un espacio parcialmente cerrado en la cabina diluirá el carácter de la F1, que siempre ha sido definida por los autos de carrera abiertos y de un solo asiento. También existe la preocupación de que un halo o escudo podría hacer más difícil para los pilotos el salir de los carros en caso de una emergencia.
«Con el apoyo de los equipos, se mejorarán ciertos aspectos de su diseño», dijo la FIA sobre el halo. Antes de su introducción en 2018, los equipos podrán trabajar con la FIA para hacer del halo un dispositivo de seguridad más eficaz, aunque su apariencia probablemente no cambiará mucho. Será complicado para la F1 y los fans acostumbrarse a él, pero si puede mantener a los pilotos seguros, seguro que valdrá la pena.