El puerto de carga del iPhone tiende a ser muy confiable, pero con el tiempo, podría obstruirse, bloquearse o ensuciarse, y afectar su utilidad. Si tu teléfono no se está cargando apropiadamente, o si el nivel de batería no es el apropiado, antes de llevarlo a la tienda de reparaciones podrías intentar una solución simple: limpiar el puerto de carga.
Antes de empezar
Para evitar posible problemas, si es posible, intenta primero limpiar el puerto de carga sin tocarlo ni insertar nada dentro. El puerto incluye delicados puntos de contacto y diminutas tiras de metal en las que el cable de carga debe conectarse. Si los puntos de contacto están dañados, entonces el cargador no funcionará en absoluto, sin importar cuánto trates de limpiarlo.
Por otra parte, si los anclajes que aseguran las piezas en su lugar de cualquiera de los lados se dañan, no podrán mantener el cable conectado, que es otro problema grave. La única solución después de un problema como éste es hacer que el puerto de carga sea reemplazado por un profesional, lo que tiene costos en tiempo y dinero. Entonces, la primera regla es ser extremadamente cuidadoso.
Para que el puerto de carga de tu iPhone siga funcionando como debería, o para que vuelva a funcionar, te presentamos los tres mejores métodos para arreglarlo, y lo que necesitas saber para hacerlo bien y obtener los mejores resultados. Estos métodos obviamente funcionan para otros productos móviles de Apple, como iPads, aunque tal vez deberías empezar con la tercera opción si tienes un dispositivo más grande o más costoso.
Opción 1: Usa aire comprimido
Una de las mejores opciones para limpiar el puerto de carga del iPhone es usar una lata de aire comprimido, que puedes comprar en cualquier ferretería, almacén, o a través de tiendas en línea. Sostén la lata cerca del puerto (pero no demasiado cerca), y ciertamente no intentes meter la boquilla adentro, para evitar dañar las partes delicadas. Una vez hecho esto, rocía el aire en ráfagas muy cortas y ligeras.
Te aconsejamos que resistas la tentación de soplar en el puerto: el aire húmedo y caliente de la boca humana no favorecerá al interior del puerto y sus puntos de contacto. Después de haber rociado cuidadosamente una ráfaga de aire en el puerto, espera unos segundos y luego intenta conectar el cable de carga nuevamente y verifique si es detectado por el teléfono. Si el aire ha limpiado polvo o residuos atascados en el puerto, entonces debería estar funcionando bien otra vez.
Opción 2: Arriésgate con un palillo
A veces, una lata de aire no va a ser suficiente. Podría haber suciedad acumulada en el puerto de la cual el aire no puede encargarse, o una partícula alojada con demasiada fuerza que no puede ser removida fácilmente. En estos casos, puedes intentar limpiar un poco usando un objeto delgado dentro del puerto de carga. Una vez más, todos los peligros que te mencionamos aún se aplican, por lo que es importante ser lo más cuidadoso posible. Lo ideal es usar un palillo de dientes como herramienta, ya que la madera es más suave y más flexible que el plástico o el metal.
Con un mondadientes en la mano y tu iPhone apagado, busca un lugar con buena iluminación, como debajo de una lámpara de escritorio. Inserta ligeramente la punta del palillo de dientes en el puerto de carga y muévelo suavemente. Evita presionar el palillo de dientes al principio; pero si no sale ninguna partícula o suciedad, puedes ejercer la presión más leve para un raspado suave. Más que eso, y te arriesgas a dañar el puerto permanentemente.
Trata de mantenerte alejado de los costados del puerto mientras trabajas, para evitar dañar los anclajes. Si notas que tu mondadientes está removiendo algo de suciedad, te recomendamos que, de ser posible, pares de excavar y uses aire comprimido para asegurarte que todas las partículas sean retiradas. Prueba nuevamente el cable de carga para asegurarte de que funciona.
Opción 3: Lleva tu teléfono a un profesional
Si no quieres arriesgarte con los métodos anteriores, o si los intentaste y tu puerto de carga todavía no funciona, no te queda mas que resignarte y llevar tu teléfono a un profesional. Si tienes una Apple Store cercana que puedes visitar, esta es la mejor opción.
Un empleado experimentado sabrá cómo limpiar el puerto de carga de forma segura, y contará con las herramientas profesionales que pueden hacer mejor el trabajo, como pequeñas aspiradoras y otros útiles artefactos. Lo mejor de todo es que Apple Store debería limpiar el puerto de forma gratuita y hacer que tu iPhone vuelva a funcionar, para que no te preocupes por los gastos.
Si no tienes una tienda Apple Store cercana, puedes llevar tu teléfono a cualquier tipo de tienda de reparación o empresa similar que se especialice en dispositivos o equipos móviles, y ellos podrán ayudarte. Por supuesto, no hay garantía de que alguien más lo haga de manera gratuita, pero cuando se trata de componentes delicados, tu iPhone generalmente está mejor en manos de un profesional, incluso si tienes que pagar una tarifa por ello.
Si sigues experimentando problemas con el puerto cargador, podría ser que no solo necesita ser limpiado, sino reemplazado, lo que conlleva gastos más elevados. Ese es el momento en el que tendrás que decidir si vale la pena la inversión, o si deberías actualizarte a un nuevo teléfono. Si lo haces, deberías asegurarte que también tenga carga inalámbrica, para evitar futuros contratiempos.