Una de las características más notables que Apple ha lanzado en los últimos años es la compatibilidad con la conectividad satelital en los iPhones para ayudar con la asistencia de emergencia y la comunicación. Ayudó a las personas que enfrentaban la ira del huracán Helene hace unas semanas, y ahora parece que Apple está extendiendo esa función a los relojes inteligentes.
Según Bloomberg, el modelo Apple Watch Ultra del próximo año podrá conectarse a redes satelitales. «La tecnología permitirá a los usuarios de relojes inteligentes enviar mensajes de texto fuera de la red a través de la flota de satélites de Globalstar Inc. cuando no tengan una conexión celular o Wi-Fi», dice el informe.
Cuando el sistema se introdujo por primera vez hace dos años, se limitaba a contactar con los servicios de emergencia. Posteriormente, Apple amplió el alcance para incluir también la asistencia en carretera. Con la llegada de iOS 18, la compañía permitió a los usuarios enviar y recibir mensajes de texto mientras estaban conectados a una red satelital.
En particular, el reloj inteligente ofrecerá conectividad satelital en un formato independiente. Eso significa que los usuarios no tendrán que llevar un iPhone consigo si van de excursión o se quedan varados sin su teléfono inteligente. Al hacerlo, el próximo Apple Watch Ultra también podría llevarse la corona de ser el primer reloj inteligente convencional en ofrecer soporte de conexión satelital.
Apple también está buscando cambiar los módems de Intel a un modelo MediaTek para la conectividad celular en sus relojes inteligentes en los próximos años. La compañía también se deshará de Qualcomm y pondrá un módem interno en algunos dispositivos el próximo año, incluida la actualización del iPhone SE.
Otra actualización importante será el soporte para 5G, o, para decirlo más específicamente, una versión nerfeada del estándar celular. Hasta ahora, los Apple Watch solo han confiado en 4G LTE en los modelos celulares. Esta versión de 5G apuntaría a 150 Mbps en enlace descendente y 50 Mbps en enlace ascendente, mucho más bajo que el 5G celular típico.
La tecnología en cuestión es 5G RedCap, abreviatura de 5G Reduced Capability, que apunta a una velocidad de datos máxima más alta en comparación con 4G LTE, menor latencia y una mejor eficiencia energética para las divisiones de IoT, así como sensores y dispositivos portátiles alimentados por baterías.
«Ejemplos de casos de uso que serán abordados por RedCap incluyen wearables como relojes inteligentes, dispositivos médicos portátiles y gafas AR/VR de gama baja, videovigilancia, sensores industriales, redes inteligentes, etc.», explica Ericsson, la compañía detrás de la tecnología.
Apple continúa trabajando en otra característica notable de detección de salud que ya ha sido adoptada por rivales como Samsung. Según Bloomberg, el trabajo en el monitoreo de la presión arterial aún está en curso, pero no se sabe exactamente cuándo llegará.
También se dice que la compañía está experimentando con el monitoreo no invasivo de la glucosa en sangre, pero esa función tardará en llegar. La desaceleración de la innovación en el segmento de la salud para los wearables es evidente, pero como solución provisional, Apple ha repartido funciones como la asistencia para audífonos en los AirPods a principios de este año.