Google Maps es una de las apps imprescindibles en cualquier celular, y es que los mapas de Google ofrecen rutas detalladas y con instrucciones en distintos tipos de transporte, sitios de interés con reseñas reales hechas por usuarios y las siempre útiles fotografías de Street View.
Sin embargo, puede tener un “error de configuración” que hace que Google Maps no sepa con precisión dónde estás o, más específicamente, hacia dónde estás mirando. Este problema se soluciona con un truco relativamente desconocido: calibrar la ubicación en Google Maps.
¿Cómo calibrar la ubicación en Google Maps?
El truco es por demás sencillo y consiste únicamente en calibrar la ubicación de Google Maps “dibujando” un 8 con tu celular.
Para hacerlo, solo abre Google Maps y en la pantalla principal y, con tu teléfono viendo hacia ti, muévelo en forma de 8. Hazlo como indica el siguiente short.
Es muy probable que en algún momento hayas realizado este tipo de calibración, pero si actualmente tienes problemas con tu celular porque Google Maps no sabe hacia dónde miras, prueba dibujando el 8 mientras estás en la pantalla principal. Hacerlo tres veces bastará para mejorar la precisión de tu ubicación.
Una vez que hayas realizado la calibración, abre Google Maps y haz zoom hacia el punto azul que representa tu ubicación. Si el proceso se realizó correctamente verás que el sombreado en color azul que representa tu rango de visión o hacia dónde está apuntando tu teléfono corresponderá hacia donde tú estás mirando. Puedes probarlo incluso dentro de tu casa, solo ubícate espacialmente y piensa hacia qué calles estarías mirando si no hubiera muros en tu casa.
Por cierto, este “truco” sirve tanto en un celular Android como en un iPhone, y también funciona en otras aplicaciones que funcionan con un GPS, como Waze o Apple Maps.
También, recuerda que esta es la calibración que recomienda Google, así que no te sientas tonto o tonta realizando este movimiento con tu celular, pues lo único que hará es darte una navegación más precisa y evitar que luego de dar unos pasos te des cuenta que ibas en la dirección opuesta.