Un iPhone 11 sobrevivió cerca de seis meses en el fondo de un lago de Columbia Británica, Canadá, hasta que fue encontrado y rescatado por un matrimonio de buzos canadiense.
Los seis meses superaron con creces los 30 minutos y dos metros de profundidad máxima que promete Apple como resistencia al agua, según la cadena canadiense CBC.
El teléfono fue encontrado por Clay y Heather Helkenberg, quienes de manera regular trabajan en la limpieza de lagos y ríos.
“Buceo en varios lagos y ríos de la Columbia Británica, Canadá, buscando los tesoros perdidos de la gente y limpiando la basura que encuentro […]; a menudo puedo devolvérselos a sus legítimos propietarios”, explicó Clay Helkenberg.
Hallazgo doblemente fortuito
Helkenberg publicó un video del hallazgo en el lago Harrison del valle Fraser, en el que da cuenta del trabajo que realizan y cómo encontraron el dispositivo.
Explicó que por lo general coloca los teléfonos en un recipiente de sílice para secarlos. “Me lo llevé a casa, limpié la suciedad y encendió, así que fue bastante sorprendente”, detalló.
Sacó la tarjeta SIM, la puso en otro teléfono para averiguar el número y se puso en contacto con la propietaria Fatemeh Ghodsi, que vive en Vancouver.
Ghodsi pensó que era una broma, pero luego recordó que había perdido el teléfono en septiembre de 2020 durante un paseo en botes. “Regresamos a Vancouver simplemente desesperados”, dijo Ghodsi.
El hallazgo fue doblemente fortuito, ya que el dispositivo no tenía activado el sistema de copia de seguridad automática, por lo que su propietaria pudo recuperar las fotos que creía perdidas para siempre.