Treinta mil millones de dólares. Eso es lo que genera Disney como empresa. Cada año. Es una de las compañías más grandes e importantes del mundo vinculada al ámbito del entretenimiento.
Actualmente, Disney cuenta con 18 parques de atracciones, 39 hoteles, ocho estudios cinematográficos y once canales de televisión por cable, además de la flamante plataforma Disney Plus.
Es el extraordinario legado dejado por Walt Disney, nacido precisamente un 5 de diciembre, pero de 1901, y quien dio comienzo a toda esta aventura.
Ha crecido tanto el imperio Disney que hoy, varias décadas después, vale la pena preguntarse qué hubiera pensado el icónico Walt al ver en qué se han convertido todos los sueños y años de trabajo, qué hubiera pensado, por ejemplo, al ver un servicio como el que ofrece la plataforma Disney Plus.
Una forma prematura de acercarse a esa respuesta es conocer la visión que tenía el dibujante, antes de construir todo lo que conocemos hoy.
Por ejemplo, su idea para levantar Disneyland era construir “un lugar en donde la gente encontrará felicidad y conocimiento”.
Mientras que la misión de Disney como empresa, en sus primeros años era “ofrecer entretenimiento de calidad para personas de todo el mundo”.
Así podemos entender que una de las principales preocupaciones de Walt Disney como empresario era el entretenimiento y ofrecer una instancia donde la familia en general pudiera pasar un rato agradable.
Desde las películas animadas, pasando por el principal parque de atracciones, esta inquietud se cumplió de sobra.
Si analizamos lo que ocurre con Disney Plus, debemos fijarnos antes en otro de los párrafos del plan de Walt Disney al momento de presentar Disneyland ante posibles inversionistas, especialmente este párrafo:
«Será un lugar para que padres, madres, hijos e hijas compartan momentos placenteros; un lugar para que maestros y estudiantes descubran mejores formas de entendimiento y educación».
De acá podemos entender que el dibujante, efectivamente, buscaba fomentar el entretenimiento, pero siempre y cuando éste tuviera un fin educativo e íntegro.
En este sentido, la plataforma de Disney Plus también cumpliría con estos estándares, ya que en su generoso catálogo están las producciones animadas más clásicas del imperio Disney, pero también hay otro contenido que fomenta el entretenimiento desde un punto de vista educativo, como las producciones de Pixar y los contenidos asociados a National Geographic.
También hay documentales y otras producciones que buscan mucho más que entretener.
Así, estamos casi seguros de que, si el viejo Walt estuviera vivo, pagaría sagradamente la suscripción para disfrutar del contenido de Disney Plus.