El Vaticano continúa con su estrategia de atraer a los jóvenes a la oración con el proyecto Click to Pray. Primero lanzó una app para rezar virtualmente junto al Papa Francisco y ahora llega una pulsera inteligente para aprender a rezar el rosario al estilo Fitbit, es decir, realizando un seguimiento de las oraciones. El ingenio se llama eRosary y acaba de ser lanzada por la sede eclesial de la mano del fabricante Acer.
Con la pulsera de las oraciones eRosary se aprende a rezar el rosario a través de una aplicación en el celular (disponible en español, inglés e italiano). El dispositivo, que se activa realizando la señal de la cruz, se parece a un rosario convencional pero tiene forma de brazalete, con un diseño digno de la mismísima cantante Madonna.
Consta de 10 cuentas consecutivas de obsidiana y de una cruz inteligente en la que va integrada la memoria, que registra todos los datos de las oraciones para efectuar un seguimiento del progreso.
Cuatro días de autonomía
“Una vez activada, el usuario tiene la posibilidad de elegir entre rezar el rosario estándar, un rosario contemplativo y diferentes tipos de rosarios temáticos que se actualizarán cada año. Una vez que la oración comienza, el rosario inteligente muestra el progreso del usuario a través de los diferentes misterios y hace un seguimiento de cada rosario terminado”, explica el Vaticano en un comunicado.
Y esto no es todo. La app, además, proporciona una audioguía, imágenes exclusivas y contenidos personalizados sobre el rezo del rosario. Con esta iniciativa que une tecnología y devoción, el Papa quiere que los más jóvenes recen por la paz en el mundo con contenidos para guiarles en la fe y que se movilicen «frente a los desafíos de la humanidad».
La pulsera eRosary es resistente al agua y al polvo (con certificación iP67). Su batería dura cuatro días y se recarga en 2.5 horas. Se puede comprar ya por 99 euros, a través de la web de Acer en Italia.
¿Problema de seguridad?
La idea de un rosario inteligente puede resultar muy interesante para los más jóvenes, sin embargo, parece que el nuevo rosario es fácil de hackear.
Baptiste Robert, un investigador de seguridad francés, ha hallado un error significativo en la aplicación del Vaticano (Click to Pray) en tan solo 15 minutos. Es decir, en tan solo un cuarto de hora se ha podido acceder a la cuenta de un usuario a través de su correo electrónico. Todo apunta a que el error fue posible por la manera en la que la aplicación maneja las credenciales de inicio de sesión.
«Esta vulnerabilidad es muy grave ya que permite a un atacante hacerse cargo de la cuenta de la víctima y obtener su información personal», ha subrayado Robert, tal y como recoge CNET.
Sin embargo, los cristianos pueden estar tranquilos porque, según Robert, el problema de seguridad ya se ha solucionado.