Ya sea que disfrutes jugar de vez en cuando, o seas un gamer dedicado, más te vale que vayas ahorrando: pronto podrías tener que pagar más por tus consolas favoritas, así como por varios productos relacionados a la industria de los videojuegos.
Es sabido que el conflicto entre los Estados Unidos y China ha impactado a la industria de la tecnología a nivel global, afectando notablemente los negocios del fabricante chino de dispositivos móviles Huawei, y a cualquier compañía que realiza negocios con esta empresa. Pero esta situación no se detiene allí.
Ahora, nuevas tarifas arancelarias fueron recientemente propuestas sobre las consolas de videojuegos, llevando estos problemas a esa industria, pues la administración de Trump ha propuesto $300 billones (300 mil millones) de dólares en aranceles. Debido a esto, tres de las más importantes compañías tecnológicas, Sony, Microsoft y Nintendo, dejaron la competencia de lado y unieron esfuerzos para hacer una declaración conjunta en contra de la medida.
Las tres compañías argumentan que las tarifas causarán un daño desproporcionado al negocio en general, y la carta conjunta menciona tres formas específicas en que los impuestos propuestos dañarán a la industria de los videojuegos, asegurando que afectarán a los consumidores, desarrolladores de videojuegos, tiendas y fabricantes de consolas, poniendo en en riesgo miles de empleos, y “sofocarán la innovación en la industria del juego y más allá.
Estas tarifas no podrían llegar en un peor momento para las principales empresas de videojuegos. Estamos en la recta final de un proceso de cambio hacia la próxima generación de consolas, con el PS5 de Sony y la nueva Xbox (conocida como Proyecto Scarlett) de Microsoft en camino, que se espera que llegarán en algún momento del 2020. Estos impuestos adicionales podrían reducir las ventas y la adopción de estas consolas, al elevar el costo de manera significativa.
Además, esta situación no solo se centra en las consolas que producen Sony, Microsoft y Nintendo, sino que la carta enviada por estas empresas señala que los pequeños y medianos desarrolladores de software en los Estados Unidos se verán también perjudicados.
La lista de productos originales que tendrían que pagar nuevas tarifas incluye videojuegos, controles de juegos, máquinas recreativas, e incluso juegos de mesa tipo arcade. Interesantemente, la carta no presenta un argumento para que la administración de Trump detenga completamente las tarifas o incluso elimine todas las menciones de los juegos, sino que elimine un subtítulo específico que cubre las consolas de videojuegos.
No se sabe cuándo entrarán en vigor los aranceles, pero el informe original sugiere que se podrían realizar progresos en la cumbre que tendrá lugar en Japón el fin de semana del 29 y 30 de junio.