Es común ver en fiestas o celebraciones nocturnas a personas con accesorios que brillan en la oscuridad, ya sean brazaletes, collares o prendas de vestir. Pero si en una de esas ocasiones te parece ver a alguien que tiene las pestañas iluminadas con luces de colores, no es tu imaginación.
Un nuevo producto en Kickstarter está llamando la atención de miles de seguidores. Su nombre: F.lashes, un juego de palabras que en inglés describe de qué se trata: pestañas con flash. Para ser más específicos, pestañas postizas que tienen una serie de luces LED incorporadas, que parpadean y pulsan siguiendo el ritmo de los movimientos de quien las lleve puestas. Son divertidas, interactivas y reutilizables.
Ésta parece ser la pieza de tecnología portátil que nadie pidió pero que todos quieren, porque la campaña ha arrasado con su objetivo de $40,000 dólares, recaudando más de $95,000 de apoyo al momento de escribir esta nota.
Las F.lashes parecen colocarse de una manera similar a las pestañas postizas regulares, y un video de demostración explica que esto se puede hacer en cuestión de segundos. Una vez en los ojos, las luces muestran uno de los cinco patrones diferentes. Todos tienen nombres peculiares, como «hyper burst», «endless winks», y el muy apropiado «knight riding», que se asemeja a la luz en la parte delantera del Auto Fantástico del programa de televisión Knight Rider.
Aunque estas pestañas llamarán inmediatamente la atención alguna noche de fiesta, estos no son componentes inalámbricos, y tendrás que hacer algunos compromisos para usarlas. Cada pestaña tiene un alambre delgado que conduce a una unidad de control principal que se ajusta alrededor de la parte posterior de la cabeza. Esta unidad se mantiene en su lugar con pinzas para el cabello, y necesita estar en esta posición para responder a tus movimientos.
Con la excepción obvia de las pestañas, definitivamente algunos componentes están hechos para permanecer ocultos, ya que la compañía no se preocupó por la apariencia. Por ejemplo, la unidad de control tiene el aspecto de una placa de circuito con unos botones en la parte delantera, y una ranura de la batería en la célula posterior. Lo bueno es que la batería dura unas cinco horas antes de que sea necesario reemplazarla, lo suficiente para una noche de fiesta.
Si te interesa ponértelas pero estás preocupado por tu seguridad, pues no quieres terminar quemando tus propias pestañas o que te ocurra algo peor, la compañía afirma que no hay por qué inquietarse. Al parecer no emiten ningún calor, son resistentes al agua, y es improbable que la batería cause una explosión. Además, las luces LED apuntan hacia arriba, por lo que –dicen ellos– no dañan ni perjudican la vista al momento de usarlas.
El precio de esta locura es de $40 dólares, con los que recibirás un controlador y un par de de F.lashes en uno de los colores disponibles. Pero si gastas $100, te enviarán siete sets de pestañas de colores diferentes. La campaña ha sido financiada, por lo que se espera que ya estén en proceso de elaboración, y que la entrega tenga lugar a partir de enero del 2018. Y tú, ¿te animarías a ponértelas?