Millie Bobby Brown dice que quiere graduarse de Stranger Things, que quiere cerrar esa etapa rápido y poder volar hacia nuevas experiencias, porque básicamente su papel de Eleven la ha marcado a fuego, tanto así que aún recuerda con rabia cuando a los 13 años y en las primeras temporadas, la prensa la trataba de idiota por querer figurar en las conferencias.
«Cuando estás listo, dices: ‘Está bien, hagamos esto. Abordemos este último año. Salgamos de aquí'», dijo Brown. «‘Stranger Things’ me lleva mucho tiempo de filmación y me impide crear historias que me apasionen. Así que estoy listo para decir: ‘Gracias y adiós'», confesó en la revista Glamour.
Brown señaló que interpretar a Eleven en «Stranger Things» le ha dado «las herramientas y los recursos para ser una mejor actriz», y agregó: «Cuando termine, podré seguir viendo a estas personas».
«Ha sido un factor muy importante en parte de mi vida, pero es como graduarse de la escuela secundaria, es como el último año. Estás listo para irte y florecer y florecer y estás agradecido por el tiempo que has tenido, pero es hora de crear tu propio mensaje y vivir tu propia vida».
Los tiempos en que a Millie Bobby Brown la trataban de idiota
Brown recordó la reacción violenta que enfrentó cuando era una niña de 13 años durante las giras de prensa de «Stranger Things». A menudo era criticada por hablar por encima de sus compañeros de reparto en entrevistas y «tratar de robarles el protagonismo», recordó. Brown dijo que los adultos la llamaron «idiota», «estúpida» y «mocosa».
«Somos niños, hablamos el uno sobre el otro», dijo Brown. «Simplemente me penalizaron por hablar y compartir demasiado y por ser demasiado ruidoso».
«Es difícil escuchar eso a los 13 años», agregó. «Dices: ‘No quiero volver a hablar nunca más. No quiero ser la persona ruidosa… En las entrevistas no pude evitar pensar en todos los comentarios. Así que me acordé de quedarme en silencio y hablar cuando me hablaran, aunque me moría por unirme. Sentí que no era mi turno».