Mientras las pesadillas de Jessie empeoran, Bea acepta la propuesta del Dr. Watson de investigar el robo de cuatro bebés... y termina recibiendo una noble ayuda.
Sin dinero y en problemas, Bea se une a Jessie contra su voluntad para encontrar a la persona que está robando dientes de niños. Spike espía a Watson y a Holmes.
Bea y los demás adoptan nuevas identidades para investigar el atroz asesinato de un importante miembro de una sociedad secreta vinculada a lo paranormal.
Jessie se enfrenta al inspector Lestrade en la escena de un crimen; Bea y Watson juegan al gato y el ratón; y Leo está indeciso respecto a su vida en el palacio.
Bea descubre más acerca de la vieja relación de su madre con Sherlock y Watson, y Billy considera tomar venganza a raíz de un brutal recordatorio de su pasado.
Bea sospecha que el robo de una serie de partes humanas se relaciona con un viejo caso. Jessie habla con Sherlock de sus pesadillas. Leo toma posición respecto al futuro.
Tras exigirle a Watson toda la verdad, Bea se suma a un plan para capturar al Hombre de lino. Jessie lucha con sus miedos. A Spike le cuesta mantener unidos a sus amigos.
Mientras Londres se hunde en el caos, Bea y su equipo se meten bajo tierra y viven un terror indescriptible en la arriesgada misión de localizar la grieta.